Es cierto que lo primero que nos aprendemos al leer sobre la Distrofia Muscular de Duchenne es que produce debilidad muscular y que nuestro primer miedo es que nuestro hijo pierda la movilidad de forma progresiva, pero a medida que convivimos con la enfermedad nos damos cuenta de lo grave que es este trastorno y lo relevantes que son sus consecuencias.
Y es que el retraso en el lenguaje no solo implica un retraso den la articulación o la pronunciación de las palabras, no solo significa que no se pueda entender lo que se dice; un retraso en el lenguaje supone una dificultad de expresión, de comprensión, de organizar frases e historias, de saber usar preposiciones, de emplear y organizar correctamente artículos y sustantivos (su género y número), de saber conjugar verbos….
Evidentemente, este retraso en el lenguaje y/o en el habla que manifiestan los afectados por Duchenne les causa un gran problema de aprendizaje que puede ser de gran trascendencia en su evolución personal, escolar y social e incluso esté relacionado con otros problemas de conducta, debido a la falta de recursos lingüísticos que hacen muy complicada su relación con el resto del mundo y que les llega a originar una gran ansiedad y frustración.
Así que, hay que abordar este síntoma desde diferentes frentes y con diferentes profesionales como logopedas, terapeutas de audición y lenguaje, pedagogos, neuropiscólogos e incluso con el mismo fisioterapeutas que ayuda en el desarrollo de los músculos implicados en el habla.
Es cierto que no todos los niños se desarrollan al mismo ritmo, pero en el vídeo que os pongo a continuación Pablo tenía ya dos años y medio y apenas balbuceaba palabras; cuando en teoría un niño de su edad comienza a hacer comentarios sobre lo que pasa a su alrededor, puede formar frases de dos o tres palabras, se refiere a si mismo por su nombre, tiene un cierto vocabulario comprensible, repite palabras….
Es verdad que debido al gran desarrollo de la inteligencia musical, en el caso de Pablo, cantando era otra cosa y se le entendía más que cuando hablaba; pero aún así, el retraso del lenguaje era más que evidente y, desde luego, estaba acompañado de un retraso madurativo y de aprendizaje.
Y, aunque el avance es progresivo y últimamente muy llamativo en cuanto a comunicación y aprendizaje, aún muestra un retraso con respecto a su edad.
Y, sinceramente os digo, es uno de los síntomas que, en global, más quebraderos nos da a nosotros en nuestro día a día.
Y para seguir compartiendo recursos importantes sobre Duchenne, os voy a dejar un link a unos vídeos muy interesantes y útiles sobre cómo abordar la enfermedad en todos los sentidos: corticoides, cirugía, corticoides, anestesia, tratamiento físico, fases, transiciones, aprendizaje, ortopedia, etc.
Casi cualquier duda queda aclarada en estos vídeos. Son imprescindibles, os lo garantizo.
Como muestra, os dejo un ejemplo relacionado con el tema de hoy.