Post invitado: Inés Echevarría de Utoppy.com
Desde niña, siempre he estado muy obsesionada por los valores. Los valores nos definen como personas y nos guía a la hora de relacionarnos con el entorno. En contextos de valores compartidos estamos cómodos y felices, y en el caso de que éstos no converjan es cuando se generan las fricciones.
Más allá de las palabras actuar con coherencia y enseñar con el ejemplo es la base para educar en valores, explicándoles por qué hacemos las cosas, y qué hay detrás de cada acto. El objetivo: que aprendan a pensar, construyan su propio criterio, y en un futuro sus decisiones estén guiadas por estos valores compartidos.
El Consumo Responsable, y la Solidaridad
En la sociedad en la que vivimos dos valores que considero que es clave empezar a educar, y son el consumo responsable y la solidaridad.
Votamos cada 4 años y consumimos cada media hora, así que hemos de ser conscientes de que como consumidores estamos cada vez más empoderados, y cada uno de nosotros somos agentes de cambio: cada compra es un voto hacia a un mundo que nos gustaría crear.
Para trasladar estos valores a nuestros hijos hay algunos hábitos que es clave que empecemos a adoptar, y a compartir con ellos:
– Consumir solo lo necesario
Tomar consciencia de la insostenibilidad de un mundo de excesos, e intentar ser menos caprichosos (al ritmo de consumo actual, en 2050 habremos consumido los recursos de 3 planetas).
– Comprar responsablemente
Apoyar con nuestras compras marcas y empresas que apuestan por un sistema productivo respetuoso con el entorno y el medio ambiente.
Explicar a nuestros hijos la historia que hay detrás de cada marca, producto, … será una bonita manera de conversar con ellos y dar valor a las cosas al profundizar en sus historias.
– Reciclar y Reutilizar
Alargar al máximo la vida útil de los recursos que compramos y consomimos.
Al ritmo actual, en 2050 habrá más plástico que peces en el océano, hemos de ser conscientes de ello y tratar de minimizar envases, etc. Y los que tengamos, darles una segunda vida.
Hoy en día hay maneras divertidísimas de hacer cosas a partir del reciclaje, un ejemplo es toda la moda del DIY (Do it Yourself).
– Compartir y ayudar, trabajando valores como la solidaridad
Vivimos en un mundo en el que cada vez hay más desigualdad, y es muy importante trasladar a los niños esta conciencia, para que valoren lo que tienen, y cultiven el placer de compartir y ayudar.
Participar en las iniciativas que se promueven desde la escuela es una forma de trasladar este valor. Otra forma original de apoyar causas es a través de Uttopy, una iniciativa que lancé hace un par de años para promover la solidaridad. Uttopy es una marca de moda solidaria, donde cada colección está inspirada en una causa social y ayuda a una ONG, acercándonos su historia. Poner a mi hijo estas camisetas y explicarles la causa a la que ayuda es otra forma divertida y bonita de hacerle llegar estas historias y que se involucre con ellas.
En definitiva, educar a nuestros hijos en valores como el consumo responsable, la solidaridad, y la empatía con el entorno, asentará una base de valores común con ellos que nos garantizará una relación sana, y en el mundo en el que vivimos, les ayudará a ser parte del cambio y avanzar hacia un mundo que vele por la sostenibilidad.