Gael en la piscina
Os voy a contar lo que a nosotros nos ha funcionado ya que cuando busqué información al respecto no encontré nada.
Gael es un poquito exquisito con las temperaturas, prefiere la comida fría que caliente y el agua del baño tiene que estar templada, ni muy fría ni muy caliente. ¡Así que imaginaros en la piscina!.
La primera vez que metimos a Gael en el agua empezó a temblar y llorar desconsolado y alzar las manos para que yo lo cogiera (era su padre el que se metió con el). Gael 1 - Piscina 0.
La segunda vez que lo intentamos fue un día que se fue con su tía y su abuela a la piscina, fue meter los pies en el agua y empezar a llorar desconsolado y con sentimiento. Gael 2 - Piscina 0.
Así que aunque a la tercera dicen que va la vencida, nosotros no estábamos tan seguros. Fue en la piscina de la urbanización de unos amigos, al meterle los pies empezó a temblar pero justo entonces lo sacamos corriendo diciéndole ¡Hala que guay! y lo volvimos a meter (solo las piernas) e inmediatamente lo sacamos otra vez hablándole como si fuera un juego, así que a la tercera vez ya se empezó a reír y ya la cuarta o quinta, no recuerdo lo introdujimos hasta la cintura y ya tan feliz. Así estuvimos media tarde con el super a gusto con su papi jugando en la piscina. Gael 2 - Piscina 1.
La cuarta vez, pensábamos que nos iba a ocurrir como la tercera, que tendríamos que simular que el hecho de meterlo al agua ya era un juego, pero no, en cuanto vio el agua se puso todo loco de ganas por meterse. Se baño con su papi super feliz y jugando con el churro que le dejo un niño. Gael 2 - Piscina 2.
Y ya la quinta, sexta, séptima,.... super feliz, a Gael le encanta la piscina, disfruta muchísimo y sobre todo estos días con semejante ola de calor que hay en Zaragoza.