Como leéis, así, de sorpresa total, y de forma inesperada. Bueno, inesperada no, pero mi impaciencia me ha costado un berrinche, y unos actos que espero no tengan consecuencias.
En primer lugar, tenía muchas esperanzas puestas en este mes, estuvimos de vacaciones en mi semana de ovulación y tuve muchos síntomas. Me hice un par de test de embarazo demasiado pronto pero confié en que alguna pequeña señal tendría. Pero no fue así.
Viernes 20 de octubre, me hago un test de embarazo siendo mi día 26, muy pronto, pero en los dos embarazos anteriores ya aparecía una rayita muy tenue. Quizá me la hice porque me levanté con infección de orina y sospechaba que acabaría tomándome algo. Así fue, y no solo eso, por la noche acabé en urgencias para que me dieran antibiótico, ya que tenía sangre en la orina, y no aguantaba el dolor.
Martes 24, dejo la progesterona, por fin, otros 15 días siendo yo...
Miércoles 25, me levanto como mareada y un poco revuelta, algo leve, pero..., ya no tiene sentido, llevo más de un día sin progesterona. Un momento! no tengo ni un síntoma de regla! y normalmente es dejar la pastilla y mi vientre empieza a pinchar y a inflarse, mis pezones siguen con las largas....
Test al canto, POSITIVO! No me lo creo, he pasado por esto ya 3 veces, pero esta vez si que no, en mi post anterior ya comenté que teníamos cita para la histerografía y para Ginefiv.
El berrinche que me cojo a continuación roza el ataque de ansiedad, me tiemblan las manos y no puedo ni moverme, solo de pensar que había tomado antibiótico, que anoche me tomé una cerveza y que había estado un día sin tomar progesterona.... uff...
Cuando me calmo, me ducho, sigo llorando, escribo al Señor J que estaba en el gimnasio y le digo que antes de ir a trabajar pase por casa. Como es como es, me pregunta que porqué y qué pasa, al final le tengo que mandar una foto del test. Siendo el tercer embarazo la magia de la noticia se pierde un poco.
Estamos muy contentos, pero no vamos a contarlo, esta vez no, solo lo saben mis compañeros de baile, por razones obvias, pero al menos hasta que no oiga que late su corazón no quiero volver a darle esperanzas a nadie.
Eso sí, voy a permitirme ilusionarme, tener claro que esta vez sí, y no pensar en miedos ni pesimismo, si me tengo que llevar el palo, pues me lo llevaré, pero voy a inundarme de pensamientos positivos.
Señora S.
PD: Me hacía especial ilusión probar un ClearBlue donde te dice las semanas de embarazo. No merece la pena pagar 16 por esto, pero bueno, ahí está.