El dia que toca voy al hospital con la doctora simpatía y al entrar a consulta la cara que tiene hace que me quede extrañada. Parecía que acababa de ver una película triste y estaba a punto de llorar. Tomo asiento esperando algo, no sabia si bueno o malo, pero confiada en que fuera lo que fuera había un medicamento milagroso que haría que yo fuera mas fértil.
Comienza a hablar y me comenta que tengo baja reserva ovárica y es mas difícil quedar embarazada, pienso bah entonces tarde o temprano ya caerá, seguidamente me muestra los resultados del seminograma… que es esto?
Ahora entendía la cara que tenia la doctora, azoospermia, o lo que es lo mismo, sin esperma, esperma 0… la cara de idiota que se me quedó no tenia precio, dentro de mi cabeza solo había ruido, un ruido que me aislaba de las palabras que llegaban del exterior. No podía pensar en nada, solo existía ese ruido.
A lo lejos logro oír a la doctora y vuelvo en mi. Me comenta que puede volver a realizar el seminograma o derivarnos al Hospital Clínico que es el que se especializaba en infertilidad. En mi estado logro decirle que quiero ir al Clínico y me dice que me llamarian para darme cita. Le doy las gracias y me marcho.
Salgo a toda velocidad del hospital, me dirijo al coche… que lejos me parece que está, no veo el momento de entrar en el, y nada mas hacerlo y sentarme rompo a llorar de la manera mas amarga que recuerdo.
Solo me venia a la cabeza una vida sin mi deseo de ser madre, una vida vacía, una vida que no tenia planeada.
Me calmo un poco y regreso a casa a la espera de que llegue mi marido. A su regreso le explico con serenidad (que no se de donde saqué) los resultados de la prueba. Su reacción no se hizo esperar, le cambió la cara y me dijo pausadamente ¿era culpa mía? Que momento mas infame. Solo quería decirle cosas que no fueran horrendas, hacerle ver que no era su culpa, que todo iría bien… pero las palabras no llegaban a mis labios, pero desde luego nunca lo he culpado.