Hay momentos en los que no tienes idea de cómo tranquilizar a tu bebé, lo intentas todo y terminas muy exasperada al darte cuenta que lo único que quería era la mantita que tiene desde su primer día de vida o que se tranquiliza cuando le das su chupete etc. A este objeto o ademán que hace sentir a tu bebé seguro y tranquilo se le conoce como objeto transicional o como coloquialmente lo llamamos objeto de seguridad.
Un objeto transicional es un término empleado por psicólogos para determinar un objeto elegido y amado de tal forma que el bebé no querrá mantenerse alejado de él. En una situación de estrés o de cansancio este objeto de seguridad le brinda confort y relajación al bebé, por lo cual es indispensable que lo lleves a cualquier lugar y en medida de lo posible tengas varios de ellos.
¿Cómo eligen al objeto de transicional?
La elección de este objeto ocurre entre los 6 a 12 meses de vida y la relación que se tendrá con este puede llegar a durar entre 3 a 6 años, aunque no todos los niños presentan este cariño hacia algo. Normalmente los objetos elegidos son cosas que los bebés consideran como lo más suave que hayan tocado, además de que la mayoría se encuentra asociado a objetos para dormir, tales como: mantitas, peluches, pijamas, etc. Aunque también sucede que algún movimiento sobre un objeto les brinde esta sensación de seguridad. Puede ser cualquier objeto, en cuanto tu hijo realice su elección este será impuesto y no lo cambiará por nada del mundo, se volverá su mejor amigo y estará en todo momento con él o ella.
¿Por qué eligen un objeto transicional?
La respuesta es simple y a la vez muy compleja. Los bebés al comenzar a crecer se dan cuenta de que su mamá no puede estar cuidándolos todo el tiempo, por lo cual de cierta forma reemplazan esa parte de su mamá con un objeto, que se vuelve su madre en los momentos de estrés, una madre que los escucha, una madre que ve lo que hacen y que no les da castigos. Se vuelve una madre que pueden tener ahí, para ellos, todo el tiempo. Es más probable que un bebé cuya mamá este ocupada mucho tiempo elija un objeto transicional, a un bebé cuya mamá se dedique a cuidarlo todo el día.
Suprimir el objeto transicional
No es recomendable eliminar el objeto transicional de la vida de tu pequeño, ya que el apego es muy grande y esto lo podría afectar emocionalmente e incluso causarle un trauma mayor. Es una etapa muy importante para el desarrollo del niño, en la cual los padres no tienen por lo cual intervenir, a excepción que ocurran situaciones fuera de control. Es recomendado que este objeto sea atendido al 100% por el niño. No se debe de lavar sin el previo consentimiento del pequeño ya que en muchas ocasiones el aroma influye de gran manera en la elección de este objeto. La duración del objeto depende de cada niño y aunque la mayoría de las veces se olvidan de ellos, con el paso del tiempo muchos niños se mantienen fieles a estos. Aún en la adultez los conservan, lo que es indicativo de que no hay confianza en sí mismo. Por lo cual, como padre lo mejor que puedes hacer es aceptar el objeto y dejar que la fiebre por el objeto pase.
Ahora ya lo sabes, esa manta sucia no tiene que ser tu peor enemigo, al contrario, simplemente debes de aceptarla y de llegar a acuerdos con tu pequeño para darle el debido cuidado y mantenimiento a este. Todo pasa y así como la manta apareció en su vida pronto desaparecerá, así que dale la oportunidad a tu hijo de vivir su desarrollo pleno y feliz.
Espero que te haya sido de gran interés la información y que haya resuelto todas tus dudas acerca de este objeto tan peculiar en los bebés.
Te invito a que me sigas en mi blog para encontrar más información en relación a tu bebé, su desarrollo y cuidados.
¡Hasta la próxima!