Pues este es un tema por el que me suelen preguntar mis amigas en España y quiero contaros las diferencias para mí más importantes entre ser madre en Alemania y serlo en España. Mis hijos han nacido en Alemania con lo cual no he sido en madre en España pero después de 30 años viviendo allí, creo que puedo hacerme una idea bastante aproximada de como viven la maternidad las españolas.
La baja maternal: ¡esto no es Suecia! Yo sé que en España se tiene la idea (equivocada) de que las bajas maternales en Alemania son larguísimas y que pertenecemos a ese grupo de países que permiten a las mamás estar un largo tiempo en casa con sus recién nacidos. Siento deciros que no es así. La baja maternal en Alemania es de 14 semanas y cuando estás a 6 semanas de la fecha de parto,
automáticamente (quieras o no) se te da la baja y te vas a casa a descansar. Esto me parece buena idea, no como en España donde muchas mujeres “compiten” para ver quien ha estado en el trabajo hasta un minuto antes de salir corriendo al hospital. ¿Entonces a las alemanas les quedan 8 semanas para estar con sus bebés? Pues sí y no. A partir de ese momento entra en juego el “Elternzeit“ (tiempo de padres) y pueden disfrutarlo tanto el padre como la madre. Esto les permite a uno de los dos (normalmente la madre) mantener su puesto de trabajo hasta que el bebé tiene un año cobrando el 60% de su sueldo. Digamos que es como una excedencia remunerada. A partir de aquí puede prologarse durante dos años más pero esta vez ya, sin ver un duro. De ahí la idea equivocada de pensar que en Alemania la baja maternal es de un año. Aún así, me parece muchísimo mejor que las irrisorias 16 semanas de España.
Reincorporación al trabajo: imaginad que una madre ha hecho uso de sus derechos y se ha quedado en casa durante tres años. ¿Pensáis que cuando vuelva al trabajo será como si nada hubiera pasado? Pues no. Se le mantiene el puesto y sueldo pero comprenderéis que muchas de ellas asumen “nuevas funciones” de menor responsabilidad y ya pueden decir adiós a una prometedora carrera profesional. Cierto es que a muchas mujeres ya les está bien así e incluso algunas piden una reducción de jornada y sueldo. En Alemania los contratos a tiempo completo son de 35-40 horas y muchas mujeres se reincorporan con contratos de entre 20 y 30 horas.
Las ayudas a las familias: pues aquí una diferencia abismal con España. Durante el primer año ya hemos dicho que se cobra el 60% del sueldo. ¿Qué pasa con aquellas mujeres que nunca antes han trabajado y tienen un hijo (como fue mi caso) Pues que igualmente tienen derecho a cobrar el mínimo de “Elternzeit“ que en este caso son 300 al mes durante 12 meses. ¿Cómo se os ha quedado el cuerpo a las españolas? Además, desde que el hij@ nace hasta que cumple 18 años o deja de estudiar (no importa si ya tiene bigote y vive fuera de casa) el estado paga a cada familia alrededor de 185 por mes e hijo. No hace falta hacer muchos cálculos para darse cuenta de que supone una gran ayuda para hacer frente a la educación de los hijos. Si ya le añadimos que la mayoría de escuelas en Alemania son públicas pues no os digo más que no quiero deprimiros
Las plazas de guardería: aquí viene la otra cara de la moneda. Conseguir plaza en una guardería pública o privada en Alemania es misión imposible. Conozco familias que inscriben a sus hij@s cada curso en 6 o 7 centros y se quedan sin plaza. Existen también las Tagesmutter de las que ya os hablé pero como el cupo máximo es de 5 niños pues también suelen estar llenas hasta la bandera. ¿Solución? Pues la madre en casa cuidando a los retoñ@s, no queda otra.
Horarios de los colegios: ay amigas…poneos cómodas porque esto sí que es otro mundo. Durante la guardería y párvulos funciona como en España. Desde primera hora de la mañana hasta la tarde sin problema de forma que cada familia elige las horas que más le convienen. ¿Qué pasa a partir de los 6 años? Pues mirad, os digo a modo de ejemplo el horario del colegio de mis hij@s: de lunes a jueves de 08:30 a 11:40 y los viernes hasta las 12:40. No me he equivocado, no.Cuando son algo más mayores van también un día por la tarde. Este es un ejemplo pero la mayoría de colegios hacen horarios similares. Y me preguntaréis…¿y que hago yo con un niñ@ de 6 años que a la una de la tarde está en la calle? Pues poca cosa. O tenéis un contrato de pocas horas o directamente no trabajáis. Existe también la opción de dejar a los niños unas horas en el colegio haciendo actividades extraescolares pero sobre las 15:00-16:00 hay que ir a recogerlos. Ahí es nada…
Las vacaciones escolares: pues aquí no se lleva lo de los 3 meses de verano pero lo que hacen es repartir vacaciones durante el año de forma que cada pocos meses, te cae del cielo una semana en la que por supuesto, los adultos tienen que trabajar. Aquí toca tirar de abuelos, gastar vacaciones o a veces el colegio ofrece la posibilidad de dejarlos. Nosotros lo tenemos claro. Si se pueden quedar, de cabeza que van.
El periodo de adaptación: otra diferencia abismal con España. Mis hijos han estado de adaptación en la guardería entre 3 y 4 semanas. La primera semana yo estaba dentro de su clase durante una hora, sentada en una silla en una esquina. La segudda semana lo mismo durante 15 minutos y luego salía y me quedaba un rato más en la entrada. Otro día ya me despedía en la entrada y volvía a la media hora…otro día se quedaban a comer, otro día a dormir…así hasta que yo ya no podía más con la vida. Cierto es que es un sistema muy respetuoso con el niñ@ pero yo lo veía algo exagerado. Una cosa es llegar ahí el primer día y soltar al niñ@ “a los leones” y otra cosa es estar casi un mes entero yendo y viniendo. A veces mis hijos estaban encantados jugando y a la hora se tenían que ir llorando a moco tendido porque se querían quedar. Aún así, no daban su brazo a torcer. Ya sabéis…los alemanes y las normas
La ropa: bueno bueno bueno…como deciros. Si vais a mudaros a Alemania y tenéis hij@s quedáis avisadas. Olvidad todo lo que sabéis sobre moda infantil. Aquí todo vale. Y cuando digo todo es ¡TODO! Cuadros con rayas, lunares con flores, combinaciones de colores imposibles, leggins debajo o encima de cualquier prenda, calcetines con sandalias...ya os digo que si Custo Barcelona o Desigual vieran esto o cerraban sus tiendas o fichaban a cualquier niño alemán como responsable de diseño. Yo al principio no daba crédito. Me preguntaba que clase de madre/padre permitía salir así a sus hij@s de casa pero me he tenido que tragar mi propio veneno en más de una ocasión. A veces voy por la calle con mi hija y hago ver que no la conozco Es muy normal que en ese alarde de libertad que suelen darle a los niñ@s sean ellos los que cada mañana elijan modelito con las peores consecuencias. En mi caso no es un tema de libertad. Mi hija no suele dejarme alternativa.
El carácter de las madres alemanas: pues aquí hay de todo por supuesto pero en términos generales podríamos decir que no son tan ñoñas, cariñosas, empalagosas (o como queráis decirlo) que las españolas. Suelo percibir un carácter mucho más pausado, más relajado, más permisivo…como si nada las estresara. Recogen a los niñ@s y parece que siempre hay tiempo de quedarse “divagando” por la calle, sentadas merendando…mientras yo siempre voy con el petardo en el culo y en plan sargento para que se metan en el coche. Por otro lado, me parece que en Alemania los niños están algo más “asalvajados”. Siempre que hemos hecho fiestas en casa han sido los alemanes los que han desaparecido para irse a saltar a mi cama o hacer alguna trastada. También es cierto que los padres de los niños españoles suelen estar muy encima para reprimir cualquier impulso de locura de sus hij@s, cosa que no suelen hacer los padres alemanes que están más pendientes de la conversación o de tomarse una cervecita (los admiro, de verdad). Tengo que decir a su favor, que las madres alemanas me parecen que están muy implicadas en la educación sus hijos o en temas como la alimentación o el deporte.
Por supuesto estas son las sensaciones que yo percibo y es posible que otras madres no compartan opinión, pero creo que en términos generales vivimos la maternidad de una forma distinta, ni mejor ni peor.
¿Las que estáis en Alemania como lo vivís? ¿Y a las que vivís en España qué es lo que más os ha sorprendido?