Es normal sentirse de esta manera si se pasa por una situación así, el duelo por la pérdida de un hijo nunca es fácil de asimilar y superarlo es incluso más complicado pues para muchos padres sus vidas giran en torno a sus hijos indiferentemente que sean bebes, niños pequeños o jóvenes grandes, el afecto por ellos se hace tangible desde incluso antes de que tenerlos en los brazos.
A pesar del sufrimiento interior que esta pérdida causa no se debe olvidar que son dos las personas que sufren y que para salir adelante es necesario que ambos se apoyen y se guíen, de la misma forma que afrontaron juntos la paternidad, así mismo deben estar unidos para salir adelante.
Cuando la pérdida de un hijo llega a una pareja, puede ser muy complejo para ambos entender los duelos personales, la culpa, las recriminaciones, el aislamiento se hacen presentes no solo para hundir más a la persona en su tristeza si no para arruinar su relación de pareja.
¿Cómo enfrentar la pérdida de un hijo en pareja?
Hacerlo juntos
El hijo que se ha perdido fue fruto del amor de la pareja que lo concibió, ese amor es la principal arma para poder salir de la tristeza de la pérdida y debe ser el pilar fundamental para reestablecer la familia. Hablar, escuchar, compartir ayuda a quitarse un poco del peso de la tristeza de encima y es para ambos un alivio pues no están solos.
La pareja primero
Los hijos pueden ser el motor de una familia, pero su núcleo será siempre la pareja, los padres son los que constituyen el hogar y los hijos llegan para ampliarlo, por eso cuando se enfrenta la pérdida de un hijo es necesario que se vuelva a priorizar sobre la pareja como esa base de la familia.
Comprensión
A pesar de ser pareja cada persona tiene una forma diferente de llevar el duelo, por eso hay que ser paciente y comprensivo con el otro, entender que se encuentra en otra fase del duelo y ayudarle a ir avanzando a su ritmo hasta lograr salir de él.
Amor para sanar el dolor de la pérdida de un hijo
Por encima de todo, el amor de la pareja debe ser la fortaleza para que ambos puedan salir de ese dolor y logren llegar juntos a una saludable aceptación. La muerte de un hijo nunca se supera pero se aprende a lidiar con el dolor que esto conlleva y a salir adelante a pesar de nunca olvidarlo.
Cuando hay amor en la pareja, los hijos son solo el fruto de eso y no se debe olvidar que es gracias a ese amor que ellos llegaron al mundo, por eso la pareja debe trabajar para que su relación no se deteriore tras la perdida y puedan juntos brindar amor a sus otros hijos y crecer como familia.