Creo que esta foto de "era en abril" lo dice todo.
Por desgracia, en España, la muerte sigue siendo un tema tabú para muchas personas. Cuantas veces habremos oído explicarle a un niño que una persona cercana ha fallecido como que esta dormido o que se ha ido al cielo. Que no me meto con las creencias de nadie, que se lo podemos explicar desde el punto de vista que queramos pero hay que explicar a ese niño que esa persona no va a volver, que si está en el cielo nos verá desde allí pero no podrá bajar. Lo del duelo infantil os lo explicaba en este otro post. También he oído como le decían a una mujer que se acababa de quedar viuda, en el velatorio de su marido, que aún era joven y que puede rehacer su vida.
El caso es que nos cuesta mucho ver que otra persona esta triste y asumir que lo mejor para ella es precisamente eso, estar triste. Y si encima, el duelo se debe a una persona que no vivió fuera de su madre o que lo hizo durante un periodo de tiempo muy breve, entonces si que nadie entiende nada porque al final, por qué vas a llorar por alguien a quien no conoces apenas? Pues por una sencilla razón, porque desde el día en que el test de embarazo fue positivo, esa persona ha sido mi hijo/a y eso es así le pese a quien le pese.
En mi caso, hace ya casi 3 años que perdí mi primer embarazo, fue en una visita de rutina, la primera de hecho, me hicieron una ecografía y vieron que no había latido. Lo comprobaron después de un rato (y un zumo después) y nada de nada. Fue así de simple, no hubo sangrado ni ningún otro síntoma. La ginecóloga me expuso las opciones y me decidí por un legrado que en aquel momento me pareció la mejor idea (creo que si volviese a pasarme escogería otra cosa pero no me arrepiento de aquella elección).
Esto sucedió un 11 de Diciembre lo que significa que durante las fechas navideñas tuve que soportar las reuniones familiares con las consecuencias preocupaciones sobre el útero de la mujer recién casada. También he de decir que a los pocos días del diagnóstico y el legrado (me lo hicieron el mismo día) murió mi abuelo. Era una muerte esperada pero no por ello menos dolorosa aunque debo admitir que en mi caso, como era una persona "real" (es decir que había vivido en el exterior de un útero) pude llorar por los dos sin que nadie me hiciese demasiadas preguntas (porque claro, lloraba por mi abuelo).
A pesar de esto, me considero una persona afortunada. No por haber perdido a mi bebé por supuesto pero sí porque tuve a personas a mi lado que entendieron mi situación y me permitieron vivir mi duelo. He oído historias increíbles sobre médicos en estas situaciones y yo misma he sufrido el poco tacto de algún médico pero la ginecóloga que me atendió, me hizo incorporarme y me toco el brazo para darme la mala noticia, me dijo que quizá el embarazo no saliese adelante. Más tarde, cuando se confirmó, fue la primera que me dijo que fuese a casa para poder asimilar la noticia (estaba en shock y lo supo ver) y que llorase todo lo que necesitase. En mi segundo embarazo, el primer control fue para mi un momento difícil y esta misma ginecóloga que me atendió lo supo al instante y se mostró muy comprensiva.
Me siento afortunada porque mi marido, mi madre, mi hermana y alguna amiga (tampoco puedo decir muchas) me entendieron y me apoyaron tanto en el duelo por la pérdida como en los nervios y miedos durante mi nuevo embarazo.
Creo que poco a poco somos más conscientes de que las perdidas durante el embarazo y al poco tiempo del nacimiento requieren un duelo aunque por desgracia, sigue habiendo mucho silencio alrededor de una pareja que ha sufrido una pérdida porque claro, "hay que evitar el tema". Lo siento pero esto no es así, si la persona quiere hablar del tema, lo mejor es dejar que explique y os diré una cosa, el lenguaje no verbal en estos casos es más importante que el verbal. Un abrazo puede ayudar mucho sobre todo si lo comparamos con un "no te preocupes" "eres joven y podrás tener más"...
Así que la próxima vez que alguien os diga que perdió a su bebé durante el embarazo o a los pocos días de nacer probad lo siguiente: decid "lo siento mucho", abrazad si tenéis confianza suficiente y preguntad "¿Cómo estas tu?" y si no es demasiado pedir, escuchad lo que os dicen, que aunque para vosotros la persona que a muerto seguramente no significaba nada, para la persona que tenéis delante era alguien muy amado.
Iba a hablaros de lo que pasa con el tiempo pero creo que lo dejaré para otro post que este me parece que ya me ha quedado suficientemente largo.