Está claro para todos que nuestros perros necesitan ejercicio físico para mantener una buena salud, evitar sobrepeso, y descargar energía. Pero, ¿qué pasa con la mente, la debemos ejercitar también?
La respuesta es SÍ. Ejercitando la mente de nuestro amigo, también le descargamos de energía y combatimos el aburrimiento y el hastío ya que no hay ninguna cosa que le guste más a un perro que explorar cosas y lugares nuevos.
También le ayudamos a aumentar su capacidad para resolver problemas y sobre todo pasará un rato divertido con nosotros.
Los ejercicios mentales en perros están cobrando mucho interés, y hay una gran variedad de juguetes interactivos, sin embargo en esta oportunidad hablaremos de juegos que podemos improvisar en casa.
El trilero: se puede hacer con vasos o recipientes opacos. Empezaremos con un recipiente en el que colocaremos algún "tesoro" apetecible (hot dogs, galletitas?) mientras nuestro perro no nos mire y dejaremos que lo descubra por sí mismo. Iremos añadiendo recipientes a medida que nuestro perro vaya acertando. Con este juego sencillo potenciamos su capacidad de resolver problemas.
Las escondidas: con este juego ejercitaremos la memoria de nuestro amigo y lo mejor de todo es que es sencillísimo de lograr. Escondemos un "tesoro" (comida, juguete u objeto de apego) en una habitación mientras el perro nos mira. Luego lo sacamos de la habitación por un periodo de 30 segundos (el tiempo puede variar) y lo dejamos entrar para que recuerde donde escondimos el tesoro y que lo encuentre.
Carreras de obstáculos: trabajamos la determinación. Podemos hacerlo en el pasillo de casa. Con cualquier objeto que tengamos a la mano como sillas o banquitas, realizamos una barrera para el paso de nuestro amigo. Del lado contrario ponemos algún "tesoro" y le animamos a que encuentre la forma de llegar hasta él.
Debemos recordar que es fundamental terminar las actividades con caricias y afecto para que nuestro perro las asocie con algo agradable. También debemos entender que no podemos enfadarnos porque no logra realizar las actividades o tarde más en hacerlas. Posiblemente no sea el momento adecuado para estos juegos. Debemos buscar la oportunidad cuando esté atento pero haya descargado algo de energía, evitar hacerlo después de haberlo alimentado ya que no tendrá mucho interés en los premios.
Los juegos mentales son una excelente opción para pasar un rato entretenido con nuestro amigo, estrecharemos nuestro vínculo con él y donde toda la familia puede participar para pasar un rato agradable!
Gracias a Jose Luis Valls, educador canino de TIKY DOGS por el artículo.
http://www.tikydogs.com/