La ecografía prenatal es un acontecimiento único para los padres, ya que representa el primer acercamiento visual con su hijo.
La primera ecografía de tu bebé suele desarrollarse cuando se está de unas 6 o 12 semanas, el período de tiempo lo decide el médico y hay muchas opiniones al respecto. Algunos prefieren hacerlo cuanto antes para ver como evoluciona el embrión y en cambio, otros prefieren esperar a que se termine el primer trimestre de embarazo, ya que garantiza que los padres vean mejor a su hijo y que se aprecie perfectamente el latido de su corazón.
Con ayuda de la ecografía prenatal podemos afirmar que se está gestando un bebé en correctas condiciones y es realmente cuando la mamá toma conciencia de que tiene a su hijo dentro de la tripa, pues durante los primeros tres meses los síntomas son muy leves y el cuerpo apenas cambia. Además, muchas de ellas se llevarán una sorpresa, porque es en este momento cuando se conoce si el embarazo puede ser múltiple.
La ecografía es un técnica que utiliza ondas ultrasónicas de alta frecuencia para examinar el interior de tu cuerpo y es totalmente inocuo para la persona. Existen dos tipos de ecografías que te puedes realizar durante el embarazo: ecografías en 2D o 3D/4D. Las primeras son el blanco y negro y si el feto se está moviendo salen un poco borrosas. Las segundas se realizan con al menos 26 o 29 semanas de embarazo y son más impactantes, ya que puedes ver perfectamente como es la cara de tu bebé. Las ecografías 2D son más precisas para un diagnóstico.
Lo normal es que realices tres ecografías durante el embarazo, una por cada trimestre. La primera es posible que sea intravaginal, ya que es más fácil obtener una foto clara del feto, que esos momentos tiene un tamaño muy pequeño. Las siguientes serán a través de la tripa.
Es un momento único e irrepetible, por eso te damos algunos consejos que te pueden ayudar a disfrutar más de ese momento:
- No es una prueba dolorosa, así que relájate y mira la pantalla.
- Es muy normal que al principio te cueste ver al feto. Pregunta al médico todo lo que no entiendas.
- Si comes algo con azúcar, la glucosa estimulará al feto y es más fácil que se mueva.
- Intenta tener la vejiga vacía, ya que si la tienes llena de orina puede dificultar que se vea nítido.
¿Tienes ganas de realizarte la primera ecografía? ¿Ya te has hecho una? ¿Cómo fue la experiencia?
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