Desde le primer día que vi es tarta sabía que tarde o temprano la haríamos en casa. Pero me daba mucho miedito porque sabía que no podría comer solo un poquito con lo que ello conlleva: un minuto en la boca y un siglo en el culo. Pero una es débil y ante un manjar así es difícil no caer. Y caí. Y lo peor de todo es que su dificultad es directamente proporcional a lo rica que está. Así que te puedes imaginar que hasta el menos cocinillas la puede hacer, sin temor a fallar. Y además es la tarta perfecta para hacer con niños.
Aquí os dejo la receta:
INGREDIENTES
12 obleas. Se encuentran en cualquier supermercado (yo las compré en Mercadona). Lo difícil es encontrarlas enteras porque se rompen con mirarlas
Un bote de nutella, nocilla o crema de cacao y avellanas de cualquier otra marcaPREPARACIÓN Calentamos un poco la crema de cacao para que sea más fácil extenderla. Bien lo podemos hacer calentado agua en un recipiente e introducir el bote cerrado para que se ablande la crema o metiéndotelo abierto unos segundo en el microondas. Ahora toca montar la tarta. Para ello colocamos una oblea y ponemos un poco de crema de chocolate en el centro, sin extender, y la unimos a una segunda. Así la base queda más consistente. Luego untamos bien de crema de chocolate esta segunda y ponemos encima una nueva oblea. Repetimos la misma operación hasta colocar las 12 obleas.
Después extendemos más crema por los lados y la decoramos como queramos. Te recomiendo que no utilices muchas más cosas para la decoración (tipo nata, lacasitos, bolas...) porque empalaga un poco.
Sencilla, ¿verdad? Si la haces con los niños y se les rompen los obleas, no pasa nada. Lo puedes arreglar untando más crema por encima. Y a la hora de partirla, si la dejas que repose bien en la nevera para que coja consistencia, es fácil. ¿Te animas? Yo, lo mismo, repito.
¡¡FELIZ VIERNES!!