Existen diferentes formas de criar. Voy descubriendo la mía en un mar de preguntas, dudas y errores con la única certeza de que quiero hacerlo bien y lucharé cada día por ello. Como en tantas cosas, la compañía hace la ruta más placentera en los buenos momentos y llevadera en los malos, que los hay y los habrá. La noción de ‘tribu’, que en otro tiempo vi tan ajena, toma sentido en las mañanas en el parque, en los encuentros del grupo de crianza, en planes llenos de ilusiones y descubrimientos. También en momentos de incertidumbre, ante emociones que nos desbordan, miedos y frustraciones que aprietan menos cuando se saben comunes.
Mujeres con las que no sentirse rara por seguir durmiendo con tu hijo y dándole el pecho pasados los dos años, con las que celebrar cada paso adelante y repartir cariño mezclado con canciones e historias. La prole crece y el concepto de familia adquiere un nuevo significado: el maravilloso descubrimiento de que nuestros hijos son ya un poco de todas.