Qué es la lengua de signos bebés y cuáles son sus beneficios
La lengua de signos para bebés oyentes es el uso de signos manuales que permite a los bebés y niños comunicar emociones, deseos y objetos antes de que desarrollen el lenguaje hablado.
Se suele enseñar a los peques entre los 6 meses de edad y los 3 años, pero los niños lo pueden aprender y usar incluso siendo más mayores. La lengua de signos tiene muchos beneficios y utilidades que van variando dependiendo de la edad del peque.
Uso de la lengua de signos según la edad de tu peque
De 6 meses a 1 año
Sirve para una comunicación temprana: amplia el vocabulario que los bebés aún no han adquirido mediante el habla.
Ayuda a mejorar la motricidad fina y las habilidades visuales y de atención.
Es una actividad diferente y divertida para implementar en las rutinas diarias: vestirse, comer, bañarse, cambiar el pañal…
De 1 a 3 años
Promueve el habla.
Disminuye las frustraciones y rabietas, dándoles herramientas de comunicación hasta que desarrollan el lenguaje hablado.
Da cierta autonomía, dándoles la posibilidad de elegir y decidir (siempre que sea posible) la ropa, la comida, los juguetes o juegos que quieren hacer…
Ayuda en el proceso de dejar el pañal: dando vocabulario, haciéndoles conscientes de los procesos, dándoles la posibilidad de participar en el proceso avisando con el vocabulario adquirido de signos.
Ayuda en la alimentación complementaria y es especialmente útil si se usa el Baby Led Weaning (alimentación complementaria autorregulada).
Es una manera respetuosa de atender las necesidades de nuestros peques.
Sirve como nexo entre varios idiomas cuando los peques están en un ambiente de bilingüismo.
Más de 3 años
Lo pueden usar para enseñar a sus hermanos pequeños. Esto les permite participar y ser protagonistas ante la llegada del hermanito o hermanita ayudando a disminuir los celos.
Como código secreto. Para usar con la familia o enseñárselo a sus mejores amigos.
Para usarlo en sitios donde no se puede hablar: porque se está lejos y no se quiere hablar a gritos, en una iglesia, cuando nuestros peques están en algún sitio y les podemos ver a través de ventanas pero no nos pueden oír…
Sirve para recordarles modales discretamente, sin avergonzarles. “Se dice gracias”, “se pide por favor”, esto se puede signar discretamente y los niños lo agradecen.
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