Nuestra (desastrosa) Segunda Luna de Miel

Cuando se cumplen 12 o 13 años de novios (ya es que no sé ni en qué año andamos), y 3 de casados con 2 hijas en el mundo, cuando se acerca la fecha de los aniversarios, una no tiene ni pajolera idea de qué regalar.

A mí me gusta celebrar ambos aniversarios, el de novios y el de casados, no es por nada, pero es que no veo justo que cuando te cases, olvides la fecha del de novios y no celebres ese día que comenzaste una vida junto a esa persona que está a tu lado. Por "suerte" ambas fechas caen en el mismo mes, así que solemos hacernos un buen regalo en honor a esos dos días.

Después de estar varios años sin escaparnos a solas (creo que desde nuestra luna de miel, allá por el 2010, no tuvimos más escapadas románticas) le comenté al padredelasfieras que si nuestra intención era ampliar la familia, nos merecíamos una escapada romántica los dos solos, porque nos iban a venir de nuevo muchos años sin viajar cual recién casados.

Encontramos una buena oferta de vuelo y también de hotel, íbamos buscando una cadena hotelera de la cual somos fan, porque son de las pulseritas, y es "come y bebe todo lo que quieras y más sin pagar un duro", lo que se llama comercialmente "todo incluído".

¿El destino? lo teníamos claro desde el principio, queríamos huir del frío, nunca hemos veraneado juntos, necesitábamos esas caipirinhas en nuestras manos, mientras tomábamos el sol, en una hamaca, mirando al mar. ¡Lo necesitábamos! (aclaro, en 13 o 12 años, siempre hemos viajado en invierno, que es cuando el padredelasfieras descansa, no he veraneado en mi vida con él). El destino sería Canarias!


Esta (desastrosa) segunda luna de miel, comenzó cuando una semana antes, anunciaron a bombo y platillo, que un pedazo de temporal, iba directo para las islas canarias. Mientras que en Málaga lucía un sol envidiable, Canarias era asolada por las tormentas y viento. Imaginaros nuestras caras mientras facturábamos, cuando la azafata de tierra nos daba "el pésame" por ir de vacaciones allí.

Llegamos y chispeaba, bueno, nos lo esperábamos peor. Cogimos un autobús a muy buen precio, por 5? nos llevaba desde el aeropuerto hasta el Faro de Maspalomas, ¡qué bien! porque los taxistas nos cobraban 35?, nanai, mucho dinero. El autobús, centro comercial, ah no perdón, que allí los llaman shopping center, que veía, allá que se paraba. Y una oleada de abuelos nórdicos de unos 75 años como mínimo se subían y bajaban. Os aseguro que elpadredelasfieras y yo, éramos los pasajeros más jóvenes, de aquel autobús via tierrasanta.

Tardamos en llegar al hotel, 2:30h, es decir, tardó el autobús 2:30h en recorrer 30 km, y es que el tío, se iba parando esquina por esquina de una manzana, para que una oleada de abuelos bajasen y otros subiesen. 

Por fin llegamos al hotel, deshacemos maletas, una duchita para espabilarnos, y ¡a beber!, bajamos al bar, y para nuestra sorpresa, medio imserso estaba allí sentado jugando a los dados. Los camareros nos aseguraron 3 cosas:

- el hotel estaba al 95% de la capacidad, pero...

- todos son extranjeros, menos vosotros dos, que sois los únicos españoles, y...

- la edad media de los huéspedes era de 70 años.

Vaya panorama. 

A todo esto, el temporal decidió visitar nuestra isla, y cayó en media mañana, más agua de la que Málaga ve en todo el invierno. Y nuestros bañadores en las maletas. ¿Sabéis del típico camarero gracioso que pierde su propina por una guasa que te toca los cojones? Pues este la perdió cuando nos dijo: Aquí en Maspalomas llueve solo 5 días al año, ya habéis tenido mala suerte de venir justo en esos días. 

Intentamos ver el lado positivo, somos así, nos reímos de todas nuestras desgracias; ¿qué no podemos disfrutar de esta maravilla de piscinas?



¡No pasa nada! Mañana mismo nos ponemos los bañadores y disfrutamos del spa y listo!! Podemos vivir sin tomar el sol en las hamacas, y bañarnos en esas piscinas de infarto, por las cuales prácticamente reservamos ese hotel porque nos moríamos por nadar en ellas, ¡no pasa nada y al spa que vamos!

¿Qué leches? ¡Qué estamos de segunda luna de miel! ¡Disfrutemos!

Entonces, es cuando la naturaleza se alía, para como decirlo finamente.... joderte todos planes. Y es cuando nuestra amiga, que según mis cálculos y los de la app de mi móvil, le tocaba venir una semana después, es decir, ya en Málaga, va, y hace acto de presencia, una semana antes y a niveles de recién parida. 

La cara del padredelasfieras era todo un poema, encerrados en un hotel de veraneo, sin piscina, sin spa, con temporal y con nuestra amiga!! 

La guinda fue, cuando la abuela nos llamó contándonos que Babymonster le pasaba algo, estaba hasta altas horas de la noche llorando y quejándose de la boca. Nosotros, de chulos, nos colamos, y se lo atribuíamos a los dientes y muelas que le estaban saliendo a la vez. Tal y como aterrizamos en Málaga, llevamos a la niña a urgencias, diagnosticándole el famoso virus de "bocamanopie", anulando por consiguiente, el viaje planeado y pagado que teníamos a Madrid días después. 

Por lo que entenderéis, que no, que la tercera monster no viene en camino; que no, que el año que viene no vamos a veranear fuera porque visto lo visto, me quedo en mi costa del sol aguantando guiris en verano; y que no, de segunda luna de miel tiene este viaje más bien poco, aunque de desastroso, mucho.