Las que sois expertas en “niños que van a la escuela infantil” seguro que pensáis que sois una pardilla y puede que se os venga a la cabeza un “obvio” con cada uno de los puntos de este post. Pero os aseguro que estas cosas me han pillado tan de sorpresa que tengo la sensación de haber vivido en los mundos de Yupi.
Como os comenté en este otro post, Olivia ha empezado la guardería este año y después de poco más de un mes y de haber flipado con algunas cosas, me siento en la obligación de compartir estas cuatro percepciones. Lo primero para quedarme yo bien a gustito, y lo segundo para informar a las futuras almas cándidas, que como yo pensaban que las cosas eran un poco diferentes.
El comienzo del curso requiere más preparativos que un viaje alrededor del mundo.
Cuando Sergio volvió de la reunión de la escuela infantil que tuvo con las profes antes de comenzar el curso, llegó a casa con un listado de cosas que ni que se aproximase el fin de mundo. Yo pensaba que con un baby de guardería y su presencia sería más o menos suficiente, pero no. Obviamente esto depende de la guardería, pero una vez compartida mi información con otras mamis, los del “baby pelao” pasó a mejor vida hace años.
Nuestra lista incluía cosas como un cojín, una sábana, un objeto de apego, una mochila, una bolsa para la ropa sucia, una toalla con una un cordoncito para que ella sola pueda colgarla, fotos de ella, una foto familiar plastificada (esto todavía lo tenemos pendiente ¡qué desastre!), ropa de recambio, toda la ropa etiquetada con su nombre, una camiseta talla 6-7 años para los días que hagan pintura, y… así a primer golpe de mente es de lo que me acuerdo, pero había varias cosas más. ¿Qué os parece? No está mal para una niña que todavía no tiene dos años, ¿verdad?.
Los niños se ponen enfermos constantemente y los padres también.
Lo de que Olivia se iba a poner enferma cada dos por tres lo tenía más que asumido. Era algo que todo el mundo me había repetido hasta la saciedad. Pero, ¿por qué nadie me aviso de que nosotros también íbamos a caer como moscas? Te repiten tanto lo de que tus hijos se van a poner malos mil y una veces que, ¡co**!, ni siquiera había caído en que los virus son virus y no respetan edades, ni condiciones. Así que en lo que llevamos de curso llevamos una gastroenteritis de caballo que hemos pasado los 3 y un catarrazo de aupa con dolor de garganta incluido. El último virus solo le ha afectado a ella, al menos de momento.
Los niños van a la escuela infantil si o si aunque estén incubando un virus nivel planetario.
Se suponía que cuando los niños están enfermos no deben ir a la escuela infantil, que tienen que quedarse en casita, curándose y evitando contagiar al resto de compañeros. Es un suponer muy supuesto, ya que si esto fuese así los niños que van a la escuela infantil no enfermarían tanto, es una obviedad. Yo, ilusa de mi, pensaba que eso se respetaba y que más o menos los padres actuaban de manera responsable con respecto a este tema. Ahora sé que no.
Obviamente no vas a dejar a tu hijo en casa porque tenga un poco de moquillo. Entonces no iría a la escuela infantil ni un solo día en todo el curso. Pero si tiene un gripazo de caballo o un virus infantil de esos que les dejan KO, alma de cántaro… no seas cabr*** y déjale en casa para que la criatura se recupere. Tanto él (o ella) como sus compañeros de clase te lo agradecerán. Seamos un poquito responsables con este tema. Sé que a veces puede ser complicado encontrar a alguien que se quede con nuestros hijos y que los horarios de vida actuales son difíciles de combinar con nuestro papel de “padres responsables”. Pero llevar a nuestros hijos de Ibuprofeno hasta la cejas mientras pasan la mañana en el cole, tampoco es justo.
Estas son tres de las cosas que más me han llamado la atención y como “madre primeriza” no conocía, pero me da que iré descubriendo muchas más. Creo que en otros post tendré la oportunidad de profundizar en el maravilloso mundo de los “deberes para padres” o temas similares que sin duda me tienen muy loca.
¿Cuáles son esas cosas que os sorprendieron muy mucho cuando vuestros peques comenzaron la escuela infantil?