La enuresis es un motivo de consulta frecuente en el pediatra de atención primaria y ahí se realiza el abordaje inicial de esta enfermedad, así catalogada por la OMS. Sobre la enuresis infantil he escrito varios post pero creo que es necesario seguir hablando de este tema en tantos artículos como sea necesario. Hoy me llegan algunos datos expuestos en el 2º curso interactivo Patologías frecuentes y urgencias en pediatría que se acaba de celebrar en Málaga.
Las principales patologías nefrourológicas en el niño son las malformaciones congénitas del riñón y de la vía urinaria, infecciones de orina, trastornos miccionales y enuresis, litiasis, hipertensión arterial, daño renal agudo y enfermedad renal crónica.
La mayoría de los niños no aceptan la enuresis. El éxito de su tratamiento son la competencia del pediatra en la realización de la historia clínica y una relación médico-paciente de confianza.
La enuresis es frecuente. Su prevalencia varía con los factores socioculturales. Afecta aproximadamente al 10% de los niños de 7 años lo que supondría de 2 a 3 niños enuréticos en un aula de primaria, y entre el 1 y 2% de los adolescentes y adultos jóvenes”
Dra. Montserrat Antón Gamero, FEA Pediatría de la Unidad de Nefrología Pediátrica del H. U. Reina Sofía de Córdoba ponente del curso.
El papel del pediatra y la familia en el abordaje de la enuresis
La competencia del pediatra en la realización de una historia clínica dirigida y estructurada con registro de las micciones y de los episodios de incontinencia, junto con una relación médico-paciente de confianza que permita conocer las expectativas del niño y su familia, son las bases del éxito del tratamiento de la enuresis. En casos de mala respuesta al tratamiento o incontinencia urinaria con sospecha de organicidad estos pacientes son remitidos por su pediatra para atención especializada” asegura la pediatra.
“Un abordaje adecuado se basa en la formación de los pediatras, familias motivadas, expectativas realistas y seguimiento clínico cercano”, explica la experta.
La mayoría de los niños dependiendo de la edad, grado de madurez y repercusión social, no aceptan la enuresis. Paralelamente algunas familias se adaptan a la situación y no se muestran preocupadas mientras que otras reconocen ansiedad y dificultad para su manejo.
Según la Dra. Montserrat Antón, la prevalencia de la enuresis, patología frecuente en pediatría, disminuye con la edad, se calcula que el 15% de los niños alcanzan anualmente el control de esfínteres. La enuresis es excepcional en la edad adulta y se estima en el 0,5%. La prevalencia en niños es casi el doble que en las niñas en edades iniciales hasta igualarse en la adolescencia continúa.
La consideración de la enuresis como un proceso benigno con escasa repercusión orgánica y que se resuelve espontáneamente en la adolescencia-juventud, hace que algunas familias le resten importancia y no consulten o que sigan difícilmente un tratamiento que requiere esfuerzo y motivación. De igual manera algunos profesionales adoptan una actitud de espera vigilante sin promover tratamiento alguno.
El efecto psicológico de la enuresis
El efecto psicológico de la enuresis es significativo, aunque son escasos los estudios que analizan su impacto en la calidad de vida relacionada con la salud de los niños:
baja autoestima,
problemas en las relaciones sociales en los casos más graves,
o alteraciones del sueño, entre otros,
que se resuelven con un tratamiento exitoso con escasa repercusión en la edad adulta.
Otros objetivos del Curso interactivo Patologías frecuentes y urgencias en pediatría
Además de la enuresis, el curso tiene el objetivo de “ser una actualización de patologías frecuentes en la urgencia pediátrica y patología cardiológica y nefrológica a través de la presentación de casos clínicos interactivos con la participación de los asistentes,. indica el Dr. Javier Pérez-Lescure Picarzo, Jefe de Proyecto de Pediatría y Neonatología. Cardiología Infantil del H.U. Fundación Alcorcón, coordinador del curso y uno de los ponentes.
El síncope o patologías nefrourológicas frecuentes en el niño como malformaciones congénitas del riñón y de la vía urinaria, infecciones de orina, trastornos miccionales y enuresis, litiasis, hipertensión arterial, daño renal agudo y enfermedad renal crónica son otros de los temas abordados por los más de 200 profesionales de la especialidad reunidos en el curso que ha contado con el patrocinio de Ferring Productos Farmacéuticos.