La semana pasada saltó la noticia de que la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, había sugerido la posibilidad de organizar un concurso de recogida de colillas o de papeles entre los niños y después "darles unos premios" para así concienciar a los pequeños de la importancia de tener una ciudad limpia. Incluso pensaba en darles unas tarjetas rojas para que los niños las pudieran sacar a sus padres cuando tirasen la colilla o un papel al suelo.
Pues ya sé de una que ni va a participar en tan divertido concurso ni tampoco va a sacar tarjetas. Porque no lo considero un método eficaz de concienciación ciudadana. Porque creo que la educación debe ser al revés, de padres a hijos, y por mucho que al niño le haga gracia sacar la tarjeta, al padre maleducado le va a traer al pairo que le saquen una, dos o tres tarjetas. Como si le sacan el tarjetero completo del pequeño Nicolás. Y como en esta casa siempre se ha inculcado que no se tiran las cosas al suelo, y tanto ha calado que los bolsillos del babi del cole son lo más parecido a la papelera de clase (el papel de la merienda, un trozo de goma, alguna viruta de sacar punta...) no me da la gana de que la Princesa vaya recogiendo la
Parece que todavía la alcaldesa no se ha dado cuenta de que, como decían los antiguos, la letra con sangre entra. Y mientras no nos rasquen el bolsillo, no hay tarjeta roja, azul o amarilla que haga cambiar los hábitos de una persona maleducada y cochina. ¿Y por qué no se conciencia castigando a los que ensucian? Lo mismo si los niños ven que sus padres son castigados, ellos no lo harán. Así, creo yo, que sería más justo y más eficaz. Pero claro, yo no soy la alcaldesa...
Y tú, ¿qué opinas? ¿crees que es una medida eficaz? ¿crees que es una manera de concienciar a los niños? ¿Dejarías participar a tus hijos en la iniciativa?
¡¡FELIZ LUNES!!