¿Cómo dejar el pañal? El ir al baño es una necesidad fisiológica básica para los niños pequeños. Debemos estar atentos para poder determinar cuándo un niño puede dejar el pañal y adquirir la capacidad de utilizar con éxito el baño. La transición del pañal al uso del baño debe ser un proceso que se trata con tranquilidad y sin generar ansiedad en el niño o los padres. Debemos asegurarnos que este sea un cambio positivo puesto que tiene efectos emocionales importantes en el niño.
¿Te sientes presionada a apresurar a tu hijo a dejar el pañal?
Constantemente observamos casos en los que este proceso de cambio se convierte en una lucha innecesaria de poder entre el niño y el adulto. ¿Por qué? Los padres sienten una gran presión para iniciar el entrenamiento de baño con sus hijos puesto que instituciones educativas, el internet y hasta el vecino ejercen una fuerte influencia en la decisión de iniciar este proceso lo antes posible. Déjame decirte que si has iniciado el proceso de entrenamiento de baño con tu hijo tomando en cuenta factores externos, consejos para dejar el pañal y presiones sociales te espera un reto muy grande y complicado.
La capacidad para controlar la vejiga y funciones del intestino difiere de niño a niño es por esto que cada niño se despedirá de sus pañales a su momento y cuando esté físicamente preparado. Algunos niños habrán dejado el pañal a los dos años mientras que para otros tomará más tiempo, esto es perfectamente natural.
A continuación, encontrarás indicadores que ayudarán a determinar cuándo tu hijo está listo y cómo está comunicando que quiere comenzar el proceso de entrenamiento de baño.
Si tu hijo está listo para dejar el pañal te mostrará los siguientes indicadores. ¡Aquí vamos!
¡MAMÁ, PAPÁ CÁMBIAME! Le molestará mucho tener su pañal sucio. Apenas se sienta con el pañal sucio pedirá que lo cambies y si no lo haces se mostrará disgustado. Es una buena idea el utilizar un pequeño y simple refuerzo positivo cuando tu hijo te pide que lo cambies “gracias por avisar”.
Empezará a utilizar palabras como “pipi”, “popo”, “caca”, “me moje” etc. como vocabulario nuevo. Al usar este vocabulario empezará a comprender cómo comunicar y podrá determinar verbalmente asimilando qué sucede en su organismo.
Permanecerá con su pañal limpio por períodos más extendidos.
Puede acceder al baño y tiene la habilidad de bajar o subir su ropa él mismo.
Tiene curiosidad por el uso del baño, pide acompañarte al mismo.
*Es importante despedirse de los pañales cuando tu hijo está tranquilo sin cambios grandes en su vida por ejemplo: cambio de casa, inicio de clases, nuevo hermano, etc.
Cuándo el entrenamiento de baño se convierte en un reto difícil.
Existen ocasiones durante el proceso de dejar pañal donde los niños tienen accidentes y se mojan o ensucian ¡TRANQUILA! Cuando esto suceda cambia a tu hijo sin retarlo y refuerza la idea de que todo está bien y que hay que seguir practicando para lograr su misión de mantener la ropa limpia. Así mantendrás su autoestima y él tendrá la seguridad de seguir esforzándose en este proceso.
“Si me ensucio me cambian rápido, ¿para qué ir al baño? Prefiero seguir jugando” Asegúrate de que tu hijo sea el que se saque los zapatos y la ropa, puedes ayudarle un poco y que sea él mismo quien se ponga la ropa limpia. Así, te aseguras que tu hijo se esfuerce por ir corriendo al baño cuando sienta que lo necesita para no tener que lidiar con la tediosa tarea de cambiar su propia ropa.
El entrenamiento se convierte en un reto difícil cuando los niños han sido castigados o regañados generando ansiedad alrededor del tema o cuando los padres ponen demasiado énfasis en repetir y repetir y repetir cómo utilizar el baño.
¿Cuál es el PLAN?
Si piensas que tu hijo está listo para despedirse de sus pañales comunícate con las personas a cargo de su cuidado y crea un plan de acción. Es importante crear un plan coherente entre la casa y el centro infantil para obtener mejores resultados. Si lo hacen solos pongan manos a la obra.
Si tu hijo está listo asegúrate de estarlo tú también. Para este proceso necesitas paciencia y tiempo ¿Estas tú lista para empezar?
Utiliza siempre el mismo vocabulario cuando se refiere a sus funciones corporales así, él sabrá cómo expresarse y comunicarte lo que necesita.
Dale la oportunidad de que te vea a ti o algún hermano usar el baño.
Involucra a tu hijo, llévalo a escoger su asiento nuevo para el baño o sus nuevos calzoncillos.
Comunícale tus expectativas de manera clara“…lo que espero de ti es que ahora cuando necesites utilizar el baño lo hagas aquí…”
Dale una responsabilidad “tu misión secreta de hoy es que la Dora la Exploradora de tu calzón no se moje o ensucie hoy día” si ha pasado Dora la Exploradora una hora seca y limpia refuérzalo “Veo que Dora está seca estoy muy feliz por ti”.
Intenta descifrar el patrón de uso de baño de tu hijo. Anota por algunos días en qué horas ensucia su pañal y busca un patrón. Así podrás anticipar y predecir cuándo tu hijo usa el baño y podrás llevarlo incrementando las probabilidades de que lo haga en el inodoro.
Cada intento es un ¡Dame 5…!
Lleva siempre una mudada extra.
Puedes tener un libro en el baño, así será más divertido.
Utiliza muñecos, libros, títeres para crear un juego que explique a tu hijo lo que le está pasando.
¡Manos a la obra! ¡Chao pañales!
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