Lo cierto es que la alimentación, desde la infancia hasta la edad adulta, esta dominada por el poder que ejerce la industria alimentaria y el poder del marketing. Tanto en los anuncios, páginas web, supermercados, y, sobre todo, por tradición social, se han instaurado ciertos tipos de menús o comidas habituales, consideradas como poco saludables.
Existe la idea preconcebida de que un niño será más feliz comiendo chocolate, dulces o fritos, si embargo, la mayoría de estos gustos se inculcan inconscientemente por la sociedad. Un niño que nunca ve a sus padres comer fruta, nunca sentirá atracción por esta. Lo más habitual y aparentemente inofensivo es proporcionar, sobre todo, a la hora del desayuno o almuerzo, alimentos ultraprocesados, optando por soluciones rápidas.
Sin embargo, si acostumbrados desde temprana edad a los niños a comer todo tipo de nutrientes, aunque se salgan de los convencionalismos desde que se levantan hasta que se acuestan, evitaremos el sobrepeso y obesidad infantil proporcionándoles energía y salud.
Lo adecuado en la alimentación es no consumir más del 10 % de la energía a través del azúcarOMS
Lo más adecuado es proporcionar alimentos naturales y saludables.
Ejemplos de desayunos saludables para tus hijos
Zumos de fruta y batidos caseros
Pese a que hay que invertir un poco más de tiempo cada mañana, el aporte nutricional y energético es mucho mayor además de ser más saludable.
En este caso se puede ofrecer una mezcla de frutas o una fruta en concreto, por ejemplo un batido de plátano o frutas del bosque.
Yogur con frutas y avena
Tostadas integrales
Estas tostadas pueden ser acompañadas de multitud de alimentos, como mermelada casera, jamón, patés de legumbres, mucho más!
Tortitas o crepes caseros con fruta o sirope de arce
Galletas caseras con cereales y chocolate