¿Cuáles son las causas del dolor de implantación?
El origen del dolor de implantación se remonta a la ovulación. Como sabemos, durante la ovulación la mujer libera un óvulo maduro de sus ovarios que puede ser fecundado por un espermatozoide durante su viaje hasta el revestimiento endometrial del útero. Este revestimiento es muy rico en nutrientes, ya que se suministra con suficiente sangre de los vasos sanguíneos que forman una enorme red alrededor. Entonces los calambres de implantación tienen lugar cuando un feto recién formado (llamado cigoto) se apega a este revestimiento. Este suceso puede provocar sensaciones ligeramente dolorosas a menudo acompañadas por un sangrado muy tenue.
Existen otros factores que pueden desencadenar cierto dolor y ser confundidos con los calambres de implantación, especialmente si la mujer está ansiosa esperando un posible embarazo, por ejemplo, los quistes en los ovarios. Los calambres uterinos pueden ocurrir debido a la formación de pequeños sacos de líquido conocidos como quistes ováricos durante la ovulación. Estos normalmente desaparecen una vez que se libera el óvulo.
¿Cuál es la diferencia entre el dolor de implantación y el dolor menstrual?
Una forma de distinguir los calambres menstruales y el dolor de implantación es comprobando la fecha. En la mayoría de las mujeres los calambres de implantación se producen alrededor de 7 días antes de la menstruación. Pero esta no es la única diferencia, la implantación suele provocar una secreción sanguinolenta muy ligera de color marrón o rosa, que luce como manchas y dura de algunos minutos a 1 o 2 días como máximo. Claramente no se trata del período menstrual, que provoca un sangrado rojo brillante, abundante y duradero.
Cómo se siente el dolor de implantación
Este dolor es muy leve, a veces se acompaña de cierta tensión alrededor de la parte baja del estómago. El proceso de empotramiento puede ser tan sutil, que algunas mujeres ni siquiera lo notan, no sienten calambres ni experimentan un manchado vaginal. Si una mujer presenta dolor en los hombros, cansancio, debilidad, mareos, dolor pélvico, sangrado con coágulos o sangrado muy abundante, entonces debe buscar ayuda médica inmediata. Esto lejos de ser normal por la implantación exitosa, podría indicar un embarazo ectópico o alguna otra condición seria.
Cuándo debo contactar a un médico
Mientras la sensación de calambre sea leve, se considera normal. Si el dolor es tolerable, posiblemente desees esperar tres o cuatro días para ver si desaparece, pero los siguientes síntomas no deben pasarse por alto:
Sangrado anormal intenso
Tejidos grisáceos o rosados en tu descarga vaginal
Sangrado por más de 4 días
Sensibilidad en la parte baja del abdomen
Dolor insoportable que dura más de 24 horas
Calambres o cólicos fuertes
En presencia de los calambres normales de implantación se recomienda tomar al menos 8 vasos de agua al día, levantarte y dar paseos cortos, realizar ejercicios de Kegel o inclinaciones pélvicas.
Si no te alivias, trata de tomar un baño caliente o colocar una bolsa de agua o toalla caliente sobre la zona adolorida. Sólo ten cuidado de no aplicar demasiado calor o presión. Un suave masaje también podría ayudar a reducir los síntomas desagradables. Además, aumenta el consumo de fibra en esos días para evitar el estreñimiento.
Tu estilo de vida puede contribuir a empeorar el dolor. Por esta razón, debes evitar el estrés. Considera cambiar tu horario de trabajo, descansa un poco, habla con una amiga, medita o practica alguna postura de yoga que te ayude a relajarte. Mientras sientas los calambres, evita tener relaciones sexuales.
En resumen, los calambres de implantación pueden ser muy normales, pero no tienes que tomarlos a la ligera. Puedes ocuparte de ellos y controlar el malestar siguiendo los consejos que hemos mencionado antes. Ante la presencia de cualquier síntoma que cause dudas o sospechas, debes acudir al médico para velar por tu salud y la del posible futuro bebé.