¡Mira que tenía tiempo sin traerte una receta! será porque en la cocina últimamente probar... como que lo hago poco jajaja. Esto de tener dos pequeñajos en pleno apogeo de los dos años no me deja tiempo ni para inspirarme con los platos y lo poco que he probado ha sido por accidente.
Ejemplo de ello es el plato que te traigo hoy, te preguntaras ¿cuál fue el accidente? pues un despiste. Pensar que tenía otra cosa en la nevera y encontrarme con que... nada que ver. Y como realmente llevo unos días en plan ahorradora me vino de maravilla. Debo decir en esta parte del post que para hacer justicia, el nombre del plato se lo debo a Carolina de Mamá Resiliente que muy amablemente me dio la idea después de un tweet que publique ¡gracias Carol! con un pequeño cambio pero la esencia del nombre esta allí ;)
Ya sabes que una de las cosas que nos caracteriza a las familias numerosas es que constantemente estamos buscando el ahorro, y es que es muy difícil sacar a una tropa completa adelante y darles de comer ¡ya ni te cuento! sobre todo teniendo en cuenta que el mayor ¡come por tres!
Quise aprovechar todos los restos que tenía en la nevera y congelador y así lo hice y la verdad ¡salio un guiso estupendo! tenía trocitos congelados de la carne de los peques. Un trozo de pechuga, 4 filetes de cerdo y un trozo de ternera, ¡pues con esto hago un guiso! y así fue, ahora te explico como lo hice.
Ingredientes:
Una pechuga de pollo,
4 filetes de cerdo,
Un trozo de ternera,
Cebolla,
Pimiento rojo y verde,
Ajo,
4 patatas,
Aceite de oliva,
Tomate frito (un chorro)
Ajo en polvo, perejil, pimienta blanca, pimiento dulce y sal al gusto,
Macarrones (medio kilo aproximadamente).
Preparación:
Corta el pollo, el cerdo y la ternera en cuadraditos pequeños y adóbalos con ajo en polvo, perejil, pimienta blanca y sal.
Deja reposar.
Corta la cebolla, los pimientos y 4 cabezas de ajo de manera muy finita y sofríelo todo en una olla grande con un buen chorretón de aceite de oliva.
Coloca las carnes a sofreír y dale vueltas constantemente,
Cuando este todo bien dorado añadele un buen chorro de tomate frito y una pizca de pimiento dulce. Añade dos litros y medio de agua (esto varia en función de como quieras el resultado, espeso o caldosito)
Cuando el agua rompa a hervir rectifica de sal.
Pela y corta las patatas en cuadraditos y añádelas al guiso durante aproximadamente 5 a 8 minutos, Pasado este tiempo añade los macarrones, 8 minutos si te gustan en su punto y 10 si lo quieres un poco más hechos,
Tapa, apaga el fuego, déjalo reposar ¡y listo! ya tienes un rico guiso con las sobras de lo que tenías en la nevera.
A mí me gustan caldositos, que se forme una salsita con el almidón de la patata y el espesor de la pasta, por eso le añado dos litros y medio de agua, si te gustan más secos pon menos agua. ¿Te das cuenta de como a veces por accidentes en la cocina salen unos platos exquisitos? Es la prueba de que hay que atreverse y probar muchísimas cosas.
Esto es todo por hoy, si te ha gustado la receta porfis compártela y no te olvides de dejarme un comentario por aquí abajo, estaré encantada de contestarte.
Un beso corazones y ¡Buen provecho!
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Fuente: este post proviene de Blog de mimundoconellos, donde puedes consultar el contenido original.
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