Hace unas semanas nos pidieron hacer un cuento. Nos entregaron 3 cartulinas tamaño A4 y teníamos que hacer un cuento en el que el protagonista fuera nuestro hijo/a. Como muestra colocaron uno en el pasillo realizado por una de las maestras de infantil. Un cuento precioso, lleno de color, con unos dibujos espectaculares de una selva y lleno de pegatinas de animales. Una pasada, vamos.
Poco a poco las mamás y papás hemos ido entregando los cuentos ¿y qué ha ocurrido? Pues que todos los hemos hecho mal. ¿Por qué? Porque en la gran mayoría de los cuentos, la colaboración con nuestros hij@s brilla por su ausencia. Empezando por el mío, que quede claro.
En el cuento de C lo único que ha hecho ella es "posar". Hacían falta 3 fotos (una por cada parte del cuento) así que la puse delante de una pared y le decía "C, pon cara de asombro" "C, ponte de pie y mira el suelo"... y así hasta que conseguí las 3 fotos que necesitaba para el cuento.
Yo he recortado. Yo he pegado. Yo he pintado. Yo he coloreado... Cuando entregué el cuento en el cole la seño soltó "Ayyy! ¡¡Qué bonito cuento!! Ahora tienes que contárselo a tus compañeros." (Esto... ¿contárselo a sus compañeros? pero si apenas se lo he enseñado yo a ella!)
Con esto lo único que quiero es reflexionar sobre los "deberes" del cole. Ese cuento era para hacerlo junto a mi hija. Puede que fuera un cuento "imperfecto" lleno de garabatos, con dibujos mal recortados... Pero hubiera sido el cuento más bonito porque lo hubiera hecho mi hija, yo solo la habría ayudado. Y con orgullo se lo hubiera contado a sus compañeros, porque ella realmente habría participado en la historia. Pero no, no lo hice bien. Y no puede repetirse.
Mis niñas deben aprender a hacer las cosas por si mismas. Mejor, peor, más despacito o más rápido, pero tienen que aprender a hacerlo ellas solas. Mamá y papá están ahí para orientar, para ayudar, para colaborar, pero si ya empezamos a hacérselo todo sólo conseguiremos criar a dos niñas dependientes y poco autónomas. Así que en la próxima nota que reciba de "deberes", aunque tarde un poco más en entregar el trabajo, lo hará ella y yo estaré a su lado. Ayudándola en lo que necesite. Enseñándole a ser mayor.
¿Os ha pasado alguna vez algo parecido? ¿Qué opináis al respecto?
¡¡Besos!!