Se considera que un bebé es prematuro cuando nace antes de las 37 semanas de gestación, incluso los hay que nacen antes de la semana 33. Hay muchos factores por los que un bebé puede nacer antes de tiempo, pero lo importante es saber qué cuidados necesita una vez lleguéis a casa con el pequeño.
Los bebés prematuros necesitan de más cuidados y más atención por parte de los papás. Sin embargo, no siempre sus padres saben cómo deben tratar a estos niños o que precauciones deben tomar en torno a su cuidado.
Las precauciones que hay que tomar son las mismas que con cualquier recién nacido, es decir, es importante preservarlo de ambientes contaminados, del humo del tabaco, lavarse las manos antes de tocar al niño, etc....
Pero ¿cómo cuidamos a un bebé prematuro? Es sabido que no se encuentra totalmente desarrollado motivado a su nacimiento antes de finiquitar el proceso de gestación. Ahora bien, entre los aspectos a tener en cuenta en cuánto a cómo cuidar a un bebé prematuro, es preferible que durante las primeras semanas la casa tenga una temperatura ligeramente más caliente que los habituales 22 grados, ya que debido a su poco peso y a que tiene más superfície corporal en relación a su grasa, necesitará ayuda para mantener su calor.
El riesgo de infecciones aumenta en los niños nacidos antes de las 35 semanas, sobretodo las respiratorias y las digestivas, por lo que hay que tener mucho cuidado cuando se junte con sus hermanitos (en caso de que los tenga) o con personas adultas que puedan contagiarle cualquier infección.
Para la alimentación lo ideal es la lactancia materna el máximo tiempo posible, y podría necesitar más tomas que cualquier bebé nacido a término. Hay que tener en cuenta que su estómago es más pequeño y tiene menos fuerza de succión.
Imagen: Daquella Manera / flickr
¿Habéis tenido algún hijo que haya nacido antes de término?
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