Las personas somos cada vez más críticas con los demás, y aunque podemos estar sentados escuchándolos, en nuestra cabeza o luego con otras personas criticamos la postura del otro. Incluso me atrevería a decir que muchas de las discusiones que se generan son por no ser empáticos. Podemos ser buenos oyentes, buenos observadores, pero esto no quiere decir que seamos empáticos.
No se trata de adoptar la misma postura de la otra persona, sino de entender por qué esa persona piensa lo que piensa, siente lo que siente o dice lo que dice.
Un ejemplo claro es cuando un ser querido se siente mal o tiene un problema y viene y nos lo cuenta. Nosotros en nuestro afán de animar a este ser querido comenzamos un discurso motivador para intentar que esta persona piense y sienta diferente. Este discurso motivador ¿es realmente motivador?, que contestaría nuestro ser querido, probablemente diría que no es nada motivador, que lo que ha hecho es sentirse peor, sentirse culpable, incomprendido y así una lista de adjetivos calificativos negativas respecto a su persona. Por lo tanto el objetivo que teníamos de animar y/o motivar no ha sido cumplido con éxito.
¿Qué necesita esta persona? Lo que realmente necesita es que alguien le escuche, que alguien entienda por qué se siente así, por qué piensa así y por qué actúa así. No necesita que alguien le enjuicie (que muchas veces sin darnos cuenta lo hacemos), no necesita que destaquen otros aspectos positivos de su vida cuando lo que le está inquietando es precisamente lo negativo. Lo que necesita esta persona es un acto de empatía, que alguien se ponga en sus zapatos, o se ponga sus lentes para ver lo que él ve. No se trata de darle la razón como a los locos, o de seguirle la corriente, no, no es eso. Se trata de entender cómo piensa esta persona e intentar pensar como esta persona para entender lo que él siente. Si simplemente nos sentamos al lado de esta persona le damos un abrazo y le verbalizamos que entendemos lo mal que se pueda sentir, que no es para menos que se sienta mal, que tiene derecho a sentirse mal y que aquí estamos para lo que necesite, para buscar una solución, un cambio, etc. Toda esta actuación empática está claro que no va a cambiar lo que la persona siente o piensa, pero, se va a sentir comprendido, valorado, va a tener un sentido de pertenencia que hará que se sienta acompañado y todo esto le dará fuerzas para superar su situación.
Cada vez veo más necesario crear conciencia sobre la empatía y la gran utilidad que tiene en nuestro día a día con nuestras relaciones personales, tanto con adultos como con niños. Porque la empatía también es necesaria aplicarla con los niños. Un ejemplo: llevamos a nuestro niño al parque una hora, al cabo de una hora le decimos que nos tenemos que marchar, el niño no quiere marcharse y rompe en llanto, ¿qué hacen la mayoría de los padres? Regañan al niño, lo cogen de un brazo y lo llevan a la fuerza, etc. ¿Cómo crees que se sentirá este niño? Está claro que es hora de irse para casa, pero quizás sería más positivo para ambos que el padre se pusiera a su altura y entendiera la postura de su hijo, es un niño y los niños quieren estar jugando todo el día, por lo que sería más beneficioso decirle al niño algo así como: entiendo que quieras seguir jugando pero ya es tarde y hay que llegar a casa para ducharnos, preparar las cosas para el colegio, cenar y acostarnos a dormir, ¿Qué te apetece cenar hoy?. El niño se sentirá comprendido, tendrá sensación de pertenencia, y aunque igualmente hubiese preferido quedarse a jugar más tiempo en el parque, el nivel de malestar que experimentará no será como el ejemplo anterior.
Animo a todas las personas a aplicar la empatía en su día a día, y ayudar a otras personas a desarrollar esta maravillosa habilidad que creará relaciones personales más felices y positivas.
Aprovecho de dejarles un video que he visto en youtube que representa de forma breve pero clara qué es la empatía y cómo aplicarla. El video lo pueden ver en el siguiente enlace:
https://www.youtube.com/watch?v=AyInqn_Hw_E&feature=youtu.be&app=desktop
Viviana Villamayor Fleitas
www.vivianavillamayorfleitas.com
www.centroflorecer.com