¡Qué mal llevo los post sobre los meses cumplidos de Telma! Me encanta tenerlos porque con el paso del tiempo olvidamos muchos detalles y momentos. Por eso, para recordar cada detalle de su crecimiento y alimentar la parte de “diario personal” que tiene este blog, escribo cada uno de estos posts que se que me encantará leer en unos años y será un maravilloso regalo para mis hijas en un futuro.
Los primeros días de este segundo mes de vida fueron un poco complicados. Pasamos de tener un bebé muy tranquilo e independiente que a penas lloraba a una niña súper demandante que no aguantaba tumbada ni medio minuto y que había que tener 24 horas en brazos y solo se dormía en la mochila. Afortunadamente fueron un par de días. No se si fue una crisis, algo que le dolía o el cambio de tiempo, pero igual que cambió radicalmente de un día para otro, volvió a hacerlo para bien de la noche a la mañana. El resto del mes volvió a ser la Telma que conocíamos, con su tranquilidad y su pachorra característica.
En cuanto a alimentación seguimos fenomenal, su peso va subiendo y va creciendo poquito a poco. Ya estamos en los 5,200 Kg y los 58 cm. Aunque a Telma le encanta “la teta” y la lactancia con ella ha sido muy fácil desde el principio, durante este mes hemos tenido un pequeño bachecillo, una mastitis que me hizo tener una fiebre bastante alta. Afortunadamente llegó y en menos de una semana el contratiempo estaba solucionado al 100%. Eso si, la semana fue complicada cuidando de las dos, con fiesta de San Isidro en el “cole” de Olivia (cuando llegamos a casa yo estaba con 38,8ºC) y mucho cansancio.
En cuanto al sueño, Telma sigue durmiendo fenomenal. Para mi eso significa que se despierte unas 3 veces por noche, coma y se vuelva a dormir del tirón. Este último mes no hemos tenido ni una noche mala, no ha habido desvelos ni problemas a la hora de dormir y eso para mi es lo más de lo más. Ella tiene una rutina muy marcada y tiene clarísima la diferencia entre el día y la noche y así ha sido prácticamente desde que nació. Durante el día se echa varias siestas de una media hora aguantando despierta una hora y media como máximo.
Telma cada día está más espabilada, ya nos sigue con la mirada, parece que sus ojos van viendo “algo más”, imagino que de momento siguen diferenciando únicamente luces y sombras, pero se nota una clara evolución. Además ya nos ha regalado sus primeras sonrisas. Resulta que además de tranquila (cruzó los dedos para que siga siendo así) es muy, muy simpática.
Por último en cuanto a cambios físicos, de momento no se le ha caído el pelo, sigue con su pelito oscuro y sus ojos claros. Ya van varias personas que me comentan que esos ojos tienen pinta de quedarse claros, que lo son demasiado para ser solo “ojos de lactante”. Es una cuestión de tiempo, veremos en que acaba la cosa. Sea como sea será preciosa igualmente.
Y con esto doy por finalizada la evolución de su segundo mes, casi a punto de cumplir el tercero ¡qué desastre!. Aunque como se suele decir, mejor tarde que nunca.
Fuente: este post proviene de Una mamá del montón, donde puedes consultar el contenido original.
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