No deje mucho espacio para la emoción y la ñoñería, aun no había demasiado #instintomaternal en mi, ahora viéndolo con perspectiva creo que sí lo tenia pero era el miedo quien desde el minuto uno de mi embarazo le estaba haciendo un bloqueo.
Ese miedo a que algo saliera mal puso una barrera entre mi barriga y yo, no quería hacerme ilusiones, no quería darle realidad a una vida que aun no era seguro la mía, y si algo va mal?
A veces el exceso de realismo nos impide disfrutar de las cosas, es cierto que hay posibilidades de que algo salgo mal y piensas que esa coraza te ayudaría – “cuando menos alto es el castillo que imaginaste menos te dolerá perderlo” -. ¿Eso es realmente así? Ahora ya no lo creo, da igual como hubiera sido mi niña y como la hubiera imaginado, da igual lo que le pasara, yo la hubiera querido con las mismas ganas, incluso si no estaba bien, incluso si la vida de mi pequeña pendiera de un hilo, seguiría siendo mi persona favorita del mundo y la querría justo así.
Si algo hubiera que curar, ¿quien mejor que yo para hacerlo junto a ella? Ya lo tengo claro, fuera como fuera no la cambiaría por nada, por que para cada madre su niño es perfecto.
Yo tuve mucha suerte todo fue genial, de esa barriga estorbona salio (36 horas después) la niña que me convirtió en madre, ver que se movía me hizo llorar sin parar y no por los mas de 20 puntos que me había hecho al salir, eso no me importaba, ella respiraba, estaba entera y aunque solo llevaba unos segundos en el mundo, lo mejor que me había dado la vida era haberla conocido.
Mi barriga por: @fotosbienchulas
Hoy siento que mañana 16/05/2015 también será un poco nuestro cumpleaños (de superpapá y mío). Por que este año de #padresprimerizos hay que celebrarlo.
Por cierto, feliz día de la familia!! Un besito!!
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