Los problemas de estreñimiento o, también conocido como, regularidad del transito intestinal durante el embarazo varia en cada mujer, ya que depende de múltiples factores; especialmente depende de cómo es el transito intestinal regularmente, previo al inicio del proceso de gestación. Por tanto, lo que debes hacer para detectar un posible estreñimiento es observar si tu cuerpo cambia respecto a este aspecto.
Usualmente, es entre el tercer y el cuarto mes de embarazo cuando se presentan los problemas de estreñimiento en la futura madre, sino aparece en este intervalo existen escasas posibilidades de que padezca de estreñimiento durante el resto del tiempo que le espera de gestación.
Se produce debido a los cambios hormonales que afectan al músculo que se encarga de realizar el movimiento que permite la evacuación. Debemos estar alertas y poner remedio en seguida para que este problema no se convierta en algo más serio que arriesgue la vida de tu bebé.
Si percibimos que sufrimos algo de estreñimiento, lo primero que tenemos que vigilar es nuestra dieta. Debemos aumentar la ingesta de fibra y consultar al médico sobre nuestra ingesta de hierro, puesto que puede acentuar de alguna forma el estreñimiento. Además, otro buen remedio es realizar ejercicio físico de manera regular: caminar, nadar, hacer gimnasia…
Si a pesar de los cambios no notas ninguna mejoría, no te preocupes, el médico puede aconsejarte una dieta laxante durante unos días. Acompáñala de mucho agua y notarás los resultados muy rápidamente. Es fundamental que no actúes sin el consentimiento del médico puesto que el efecto laxante podría perjudicar la salud de tu bebé. No te preocupes, este problema tiene muy fácil solución.
¿Sufres estreñimiento durante el embarazo?
Imagen: Deborah de Abreu/flickr