Es más que obvio, que cada estudiante es diferente a los demás, que hay diversidad en las aulas, que a unos les gustan las matemáticas y a otros no, que a algunos les cuesta más entender el inglés que a otros, que a algunos les encanta la música, o el arte, y otros son geniales compañeros y tienen la inteligencia interpersonal elevada. Que cada uno tiene un ritmo de aprendiza distinto; unos más despacio pero de forma segura y otros más rápidos.
Lo ideal sería que la educación, pudiera atender de forma adecuada a todos esos alumnos, con sus inquietudes, con sus miedos, con sus inseguridades, con sus talentos, con su creatividad y con sus fortalezas. Podríamos decir eso de que en las aulas se debería tener más en cuenta las inteligencias múltiples. Está claro que todos queremos una educación personalizada en los centros educativos y más con los niños pequeños.
Desgraciadamente, hoy por hoy eso no es posible. Y no es posible no porque los maestros y los profesionales de la educación no quieran. Ellos son los primeros que quieren mejorar el sistema educativo, ellos son los primeros que quieren respetar cada ritmo de los estudiantes, ellos son los primeros que están luchando porque la calidad en las aulas se mejore.
Y ellos son los primeros que quieren tener en cuenta todos los aspectos de los alumnos. Quieren enseñarles tal cómo son, ellos son los primeros que quieren estar con todos esos niños a los que les cueste asimilar algún concepto y explicárselo mil veces (o encontrar otra manera) para que lo entienda.
Ellos son los primeros que quieren adaptar las programaciones para todos los estudiantes. Seguramente, ellos sean los primeros que quieran poder hacer felices a los alumnos. Dedicar más tiempo al arte, a la música, a la Educación Emocional y relación con los compañeros.
Pero no pueden, y no pueden porque en la mayoría de centros educativos tienen a un único maestro o profesor por aula con más de veinte alumnos sin ningún tipo de ayuda. ¿Podéis explicarme cómo se va a dar esa educación personalizada que tanto adoramos y que tanto se quiere aplicar en las clases?
Un único maestro tiene que conseguir la atención de los alumnos, un único maestro tiene que estar pendiente de los alumnos, tiene que asegurarse el bienestar de todos ellos y que aprendan lo que las programaciones dicen (no lo que los maestros quieren que aprendan).
Si hay algún niño en sus clases que va despacio pero seguro, no puede detenerse con él, no puede atenderle de forma personalizada, no puede dedicarle media hora a él para estar seguro de que lo están asimilando todo. Y no puede únicamente porque tiene objetivos que cumplir para final de curso. Pero que no pueda, no quiere decir que no esté deseándolo hacerlo.
Imaginaos por un momento, como cambiarían las cosas si hubiera tres maestros en el aula. Con tres maestros en el aula las cosas serían distintas. Y serían distintas porque de esa forma sí que se podría tener en cuenta las Inteligencias Múltiples, sí que se podría fortalecer los aspectos positivos de cada alumnos, sí que se podría favorecer el talento y la creatividad de cada uno.
Imaginaos por un momento, que en vez de tener a los estudiantes sentados en fila, todos los centros educativos y todas las aulas, trabajaran por proyectos, en grupos y en equipo. Imaginaos si se aplicara la metodología del aprendizaje cooperativo, ¿no se estaría favoreciendo más cosas de esta forma que la educación tradicional? Son muchos los maestros los que proponen estas metodologías a los directores del centro y a los padres, pero la realidad, es que muy pocos lo aceptan.
No lo aceptan, pero cuando maestros y profesores tienen reuniones con ellos, lo primero que dicen: “oye, que a mi hijo no le prestas mucha atención”, “oye, que quiero que estés más pendiente de mi niño”, “oye, te dije tal cosa y no lo has hecho con mi hijo”, “oye, que quiero que mi hijo desarrolle más esta habilidad”. Pero no se dan cuenta, que sin transformar la educación los maestros no van a poder hacer mucho.
No van a poder hacer mucho hasta que padres, familias y demás personal educativo que cree en la tradición no accedan a aplicar nuevas metodologías, no accedan a la innovación. No van a poder hacer mucho si los políticos siguen subiendo la ratio de alumnos por aulas y no contratan a más maestros para hacer frente a eso.
Y no van a poder hacer nada, porque el sistema educativo está obsoleto y mucha más gente de las que nos gustaría, se niega a cambiarlo. ¡Por supuesto que todos queremos una educación personalizada respetando cada ritmo de aprendizaje y fortaleciendo las cosas buenas de los alumnos! Pero, ¿de verdad creéis que ese objetivo se puede conseguir sin transformar la educación y con un sólo maestro en las aulas?
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