Todas las que hemos sido madres queremos estar en forma lo más pronto posible después del parto. Pero, ¿cómo organizarnos? Los gimnasios no suelen estar pensados para madres con bebés y para poder ir, debemos dejar al bebé con alguien que lo cuide. En esta ocasión vamos a mostrarte cómo puedes combinarlo todo, hacer ejercicios y jugar con tu bebé.
Hacer ejercicio con el bebé es la mejor opción para cualquier mamá de recuperar rápidamente la forma física después el parto.
Hoy Fiorella nos muestra una serie de ejercicios que están diseñados especialmente para las mujeres después del parto, y con la que a la vez que tonificamos y fortalecemos los músculos, estimularemos al bebe mediante el juego. Esta costumbre proviene principalmente de Inglaterra y Estados Unidos, donde hace tiempo que existen grupos de fitness para mamás con bebés que se reúnen para practicar juntas ejercicio mientras conversan y estimulan a su hijo mediante juegos, caricias y sonrisas.
¿Qué ventajas tiene este tipo de ejercitación?
1) Es una mezcla de ejercicios de fuerza y resistencia y se trabaja todo el cuerpo.
2) Se fortalecen los músculos del suelo pélvico y por lo tanto es muy beneficioso para evitar la incontinencia y para fortalecer el perineo.
3) Como estarás jugando y riendo con tu bebe, eso ayudará a tu estado de ánimo combatiendo la depresión post parto.
4) Te permitirá despejar la mente y sentirte fresca y activa.
5) Mejorará visiblemente el aspecto de tu vientre, brazos, piernas y nalgas.
6) Recuperarás más pronto el peso anterior al embarazo.
7) No hay necesidad de gastar dinero en niñeras ni gimnasios.
8) Tu bebe crecerá más sano y feliz, porque se sentirá protegido y amado gracias a que cada día duplicarás las caricias y sonrisas con estos ejercicios.
Recomendaciones:
1) Recuerda que es muy importante que tu hijo tenga la edad suficiente para mantener el cuello erguido.
2) Ambos, bebe y mamá, deben estar tranquilos, cómodos y relajados.
3) Recuerda mantenerte siempre hidratada antes, durante y después de hacer ejercicio.
4) Dedica unos minutos al calentamiento y luego de los ejercicios, a los estiramientos.
5) No olvides mirar al bebé a los ojos, acariciarlo y sonreirle repetidas veces.
6) Habla con tu hijo mientras haces los ejercicios, el sonido de tu voz lo calmará y pronto disfrutará especialmente de estos momentos y los tomará como un juego.
Y ahora sin perder más tiempo, pasemos a la rutina con nuestra entrenadora.