Cuando nació el mayor, llegaron los cólicos y las noches sin dormir me dije/ron:
- "solo es una etapa, se pasará". Y efectivamente se pasó.
Después llegaron esos días en los que caminan vacilantes y tienes que dejarte los riñones acompañando sus aun torpes pasos por que solo quieren ensayar y ensayar para aprender a afianzarlos y hacerlos mas preciosos.
De nuevo:
-"solo es una etapa, se pasará". Y de nuevo era verdad, se pasó.
Acto seguido vinieron , el NO quiero, los ¿por qués?, las rabietas, el colegio, los dientes que se caen...
Y todo correspondía y corresponde a lo mismo:
- "solo es una etapa, se pasará".
Y así se van pasando una tras otra sin darme cuenta, sin dejarme tiempo para tomar un respiro y adaptándome tan rápido como me es posible.
A veces esa adaptación ocurre a tiempo y otras veces me pilla trastabillada.
Como ahora mismo, momento en el que a mis 32 años me veo frente a dos pequeños seres humanos de 4 y 8 años, totalmente individuales que ya no son una prolongación mía, con sus pequeños problemas que comienzan a tener que resolver por si mismos y con sus equivocaciones que aunque necesarias, me duelen tanto como a ellos.
Y en medio de todo este enjambre de sentimientos me topo, gracias a Ika , con este maravilloso vídeo que creo que debemos ver mas de una y de dos veces, interiorizarlo e intentar cambiar en consecuencia.
Me quedan aun unos pocos años para enfrentarme a la adolescencia, pero prefiero ir sobre seguro por que viendo como me cuestan los cambios y aceptar estas eternas etapas....prefiero tomarme mi tiempo.
Y antes de que veáis el vídeo, quiero hacer un apunte que ya hice al respecto en el muro de Ika:
Aunque duela reconocerlo, a veces somos un poco hipócritas y la mayor parte del tiempo
faltos de memoria.
Creo que esa falta de memoria es involuntariamente selectiva y proviene
del miedo:
Miedo a que sus errores sean culpa nuestra, miedo a que pasen por las cosas
malas que tu pasaste, miedo a perderles literal o figuradamente...