No sé lo que me pasa últimamente, que basta para que esté a dieta para que me apetezca cocinar dulce. No lo pruebo y no será por cómo huele la casa cuando horneo. El sábado pasado, aprovechando una masa de hojaldre que tenía a punto de caducar, hicimos cruasanes (palabra admitida por la RAE) rellenos de chocolate. No sé si están ricos o no. Pero en casa no queda ninguno y no tenemos mascota.
INGREDIENTES
250 g de masa de hojaldre
100 ml de leche
50 g de chocolate soluble a la taza
50 g de mantequilla
20 g de azúcar glas
1 huevoPREPARACIÓN
Lo primero que debemos hacer es preparar el chocolate. Para ello diluimos el chocolate en polvo en la leche y lo ponemos a calentar en en un cazo. Dejamos que cueza sin dejar de remover para evitar que se pegue, hasta conseguir un chocolate bastante espeso. Reservamos.
Después acondicionamos el sitio de trabajo limpiando bien la mesa o mostrador donde vamos a amasar el hojaldre y luego espolvoreamos harina para que no se pegue la masa. Ya preparado, con ayuda de un rodillo extendemos bien el hojaldre para hacerlo muy fino.
Mientras, derretimos la mantequilla en el microondas y cuando esté lista la extendemos sobre el hojaldre por ambas partes. Debemos ser generosos para que luego no nos queden secos. Se deja secar unos segundos y se comienzan a cortar finos triángulos de masa.
Para que queden muy dulces debemos espolvorear azúcar glas encima de la masa y luego poner una pequeña cantidad de chocolate en la parte más ancha del triángulo de masa y proceder a enrollar con cuidado desde esa misma parte. Al terminar de enrollar, sellar un poco los picos para evitar que salga el chocolate cuando se horneen.
Terminados los cruasanes los ponemos en una bandeja de horno sobre papel vegetal y los pintamos con huevo batido y los horneamos 25 minutos a 180ºC con calor por arriba y abajo hasta que se vean dorados.
Cuando estén listos puedes volver a pintarlos con un sirope hecho de agua templada y una pequeña cantidad de azúcar glas. Yo no lo hice. Y ya estarán listos.
¡¡FELIZ VIERNES!!!
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