¿Cómo llevas la cena de Nochebuena? ¿Y la comida de Navidad? Ya has digerido el pavo, los langostinos, los canapés, el besugo, las angulas sucedáneas, el jamón, los dulces... ¡Qué barbaridad de comer! Y en dos días ¡otra vez el atracón! Por eso creo que la receta de hoy no va a tener mucha aceptación dadas las fechas en las que estamos. Pero lo mismo quieres innovar en el menú de año nuevo y te animas a hacer esta deliciosa lasaña de morcilla y pimientos. Aquí te la dejo:
INGREDIENTES (Para 4 personas)
Para el relleno
2 morcillas de arroz tipo Burgos (riquísimas las de la fábrica de embutidos del Barrio de la Estación de las Navas del Marqués)
1 pera grande de conferencia
8 placas de lasaña
Para la bechamel
50 gr de mantequilla
70 gr de harina de trigo
1/2 litro de leche
Sal
Pimienta
Nuez moscada
Para la cobertura
200 ml de nata
5 pimientos del piquillo
1/2 de cebolla pequeña
Aceite
Sal
Pimienta
PREPARACIÓN
Yo uso las placas de lasaña precocidas, así que nada más empezar a cocinar hay que poner las placas en agua caliente. Generalmente los fabricantes de este tipo de pasta habla de 20 minutos, pero a mi no me importa pasarme porque si no quedan muy al dente. Puedes decantarte por las placas que no necesitan hidratarse, pero ni experiencia es nefasta. Así que no te lo recomiendo.
Mientras las planchas se hidratan, vamos a por el resto. Abrimos la morcilla longitudinalmente para quitar la piel y echamos el contenido en una sartén, a la que previamente habremos engrasado un poco. Dejamos que la morcilla vaya haciéndose a fuego lento. Aprovechamos para rallar la pera, ya pelada. Cuando la tengamos lista, la incorporamos a la morcilla y reservamos.
Vamos ahora a por la salsa de pimientos.Cortamos la cebolla en juliana y la pochamos lentamente. Incorporamos los pimientos del piquillo y les damos un calentón. A continuación agregamos la nata y salpimentamos. Cuando rompa a hervir, retiramos y trituramos todo con la batidora. Reservamos.
Finalmente es el turno de la bechamel. Ponemos la mantequilla a calentar y vamos incorporando poco a poco la harina. Cuando la harina esté tostada, agregamos la leche lentamente sin dejar de remover para que no se hagan grumos. Cuando la masa esté ligada es el momento de salpimentar, echar un poco de nuez moscada y dejarla cocer. Nos interesa que no esté muy líquida, así que la dejaremos un rato siempre sin parar de mover para que no se pegue.
Vamos ahora con las placas de pasta y después a montar. Las sacamos del agua y las dejamos escurrir en papel secante. Mientras vamos poniendo mantequilla a una fuente de horno y montamos:
Una placa de pasta por persona, una capa del relleno de la morcilla con la pera, otra placa, otra capa de morcilla y, para terminar una capa de bechamel y la salsa de los pimientos por encima. Con la lasaña ya montada vamos al horno, precalentado a 180 grados, durante 10 minutos y ¡listo!
Parece laborioso, pero no lo es. Y el resultado es espectacular.
¡¡FELIZ JUEVES!!