La noción de tiempo se adquiere desde el nacimiento y se va perfeccionando a lo largo de los primeros años de vida. Se adquiere a través de la rutina y los hábitos. El bebé aprende a identificar gradualmente que existe un momento para cada actividad, un momento para jugar, para dormir, para bañarse; por ello la importancia de establecer y respetar las rutinas. Aquí algunas sugerencias para formar en nuestro bebé la noción del tiempo:
Muéstrale a tu bebé la claridad del día y la oscuridad de la noche, viendo a través de la ventana o cuando vayan de paseo.
Ayúdale asociando el día con el sol y la noche con la luna, y coloca imágenes del sol y la luna en su dormitorio. A primera hora de la mañana y al irse a dormir en la noche, utiliza las imágenes para reforzar los conceptos de "día" y "noche".
Elabora un reloj muy básico con las principales actividades de tu bebé. En éste reloj tu bebé podrá identificar la secuencia de sus actividades. Apóyate en el reloj para reforzar la rutina diaria.
Es importante que respetes la rutina que has establecido para tu bebé en el reloj. Te puede ser de mucha ayuda pero si la cambias puedes confundir y alterar a tu bebé.
* Recomendado a partir de los dos años de edad.
* El reloj sólo busca crear el concepto de secuencia, no de enseñar las horas.
Un factor muy importante para el aprendizaje es la constancia. Es comprensible que existan momentos en los que por más que lo desees no puedas atender a los requerimientos de tu bebé, me refiero en particular al juego o la compañía, entonces los conceptos como: "un momento" o "después" resultan realmente útiles para ambos, en especial para el bebé quien puede encontrar una explicación como respuesta temporal a su demanda, pero recuerda que el uso de estas palabras equivalen a promesas, por respeto y amor a tu hijo debes cumplir lo que has prometido y no confiar en que se olvidará lo que te pidió? lo comprobarás cuando al cumplir tu promesa veas su carita llena de felicidad.
Desde el año de edad, ve familiarizándolo con éstas frases (o las que elijas para este fin), debes para ello ser muy gestual y tener en cuenta que unos minutos de espera para un bebé pueden significar una eternidad. Así que si le dices: "Hijito, estoy trabajando, en un momento jugamos con los carritos", que no pasen dos horas para cumplir tu promesa.
Pareciera que enseñarle a esperar a un niño pequeño es imposible, pero no lo es, es cuestión de paciencia, constancia y mucho amor.
Cuéntame, ¿qué palabras o frases utilizas para enseñar la noción del tiempo a tu bebé?