MI BEBÉ TIENE SEIS MESES
Manuel cumplió hace dos días el medio año (que lejos queda nuestro primer día juntos) y, aunque está precioso y nos regala unas sonrisas enormes, también es lo que se dice un niño inquieto, intenso y curioso. Todo lo quiere tocar, todo lo quiere ver, no puede estar un ratito tranquilo. Hay días agobiantes y otros un poquito menos.
Todos tenemos en nuestra cabeza la imagen de un niño tranquilo, sosegado, con mejillas sonrosadas y que mira al infinito con una sonrisa. Bueno, puede que existan. Pero el mío no es así. Y hay días que me gustaría la idea del niño sonrosado y tranquilo. Pero el otro día hablando con una amiga me hizo ver las cosas de forma distinta; ¿no te alegras de haber tenido un niño con ganas de vida, de descubrir, de moverse, de aprender? Y sí, me encanta como es mi hijo, pero si durmiera un poquito más… Bueno, yo sería un poco más persona.
Llamadme inocente, pero creo que las películas y la literatura me hicieron imaginar la maternidad de una forma que no es. Es maravillosa. Es increíble. La necesito. Pero también es cansada. Puede que pierdas la paciencia. Y hay días que solo tienes ganas de llorar y que llegue la hora de dormir.
PUEDES ESTAR CANSADA ¡NO PASA NADA!
Y no pasa nada por decirlo (estoy dejando de sentirme culpable por esto). Hasta que no he entendido que puedes estar cansada, que puedes estar (un poquito) harta, que hay días que son muy complicados… Hasta que no he aceptado que estos días existen en la maternidad, no he empezado a disfrutar de ella.
He empezado el post queriendo hablar de los logros de mi niño en estos seis meses y solo he hablado de como me siento. Te debo un post del estilo cosas que hace mi niño y cosas que “debería” hacer.
¿Cómo es tu pequeño? ¿Tu también tienes días agotadores? ¿Consejos para esos días?
¿Quieres recibir todo lo que escribo? ¡Dime tu correo!
Nada de spam
.