El nacimiento de Simón
Hace más de año me enteré que estaba embarazada fue lo más hermoso pero en una de las ecografías el doctor nos dijo que nuestro bebé no vendría a este mundo. Sufrimos muchísimo con mi esposo y familia ya que llevábamos bastante tiempo buscando nuestro bebé.
Dos meses después me enteré que nuevamente estaba embarazada. La sensación no fue la misma vi el positivo y rompí en llanto no de alegría precisamente si no de miedo y de angustia. Al pasar de los días cuando el bebé comenzó a crecer me sentía más tranquila pero siempre con el miedo que algo malo pasara.
En el segundo control mi ginecólogo encontró problemas con mi presión arterial, que cada vez era más alta, hasta que llegó el día inesperado a las 16 semanas de embarazo cuando tuve una crisis hipertensiva gravísima y quede como un hemiplegia en el lado izquierdo. Tenía mi boca chueca y no podía caminar desde ahí empezó nuestra historia.
Simón se había aferrado a la vida nadie podía creer que había sobrevivido pero aún seguía conmigo, pasaron las semanas y mis presiones nos jugaban malas pasadas hasta que a las 28 semanas decidieron internarme en la clínica para poder aguantar al bebé lo máximo posible.
A las 32 semanas llegó mi pequeño gran guerrero Simón Alonso Castillo Moreno pesando 2040 y midiendo 45 cm fue cesárea ya que mi placenta estaba en muy mal estado y mi cordón era del porte del dedo pequeño. Mi bebé ya no comía debió quedar internado en la Uci.
El llegar a casa sin él fue terrible, aparte yo había estado con tantos medicamentos que uno de ellos no era compatible con la lactancia así que mi bebé no pudo tomar leche materna. Todos los días me iba tempranito a la clínica y estaba todo el día con mi bebé que por su prematurez no sabía succionar. Tardaba horas tratando de darle 20 cc de leche; cada cosa que lograba era una alegría y cada día que pasaba sentía que era uno menos para poder tenerlo en casa. Hasta que ese bello día llegó.
No fue fácil, en la clínica tienes médicos, enfermeras, y en casa estas tú y tu esposo. Dormía casi 30 minutos entre mamaderas, pero al ver todo lo que tu hijo lucha para vivir conectado a máquinas, lleno de tubos; el sólo hecho de tenerlo contigo te da energía. No es fácil ser madre de un.prematuro pero con amor todo es posible hoy mi pequeño ya cumplió 4 meses y me siento feliz de poder acariciarlo y mimarlo eternamente agradecida de Dios porque el que mi bebé esté conmigo es un milagro.
Después de recibir el relato de Tamara, conversamos por email sobre su historia. Así que vamos a compartir algunos detalles más.
¿Sabes que es una crisis hipertensiva cómo la que se refiere Tamara en su historia?
Una crisis hipertensiva es cuando la presión arterial se eleva más de lo normal en este caso mis presiones subieron a 230/110, esto nunca me había sucedido antes del embarazo. Luego de la crisis quede en reposo absoluto ya que mi lado izquierdo quedó como muerto estuve así casi 3 meses así.
Mi recuperación fue prácticamente un milagro ya que hay muchas personas que pasan meses o años en recuperación y quedan con secuelas en este caso yo quedé completamente sana gracias a Dios
Tamara, cuéntanos, ¿por qué la cesárea tuvo que ser a las 32 semanas?
Mi Cesárea de primera iba a ser máximo a las 28 semanas tenía una ecografía doppler todas las semanas a causa de las alzas de presión mis arterias uterinas estaban malas oxigenaban muy poco y mi placenta se estaba desintegrando los médicos empezaron a ver que Simón a pesar de todas estas dificultades seguía alimentándose y creciendo por eso lo empezaron a aguantar lo máximo posible hasta que el tope fue las 32 semanas cuando nació su cordón umbilical era del porte de nuestro dedo meñique y mi placenta pesaba apenas 256 grms
¿Pudiste hacer piel con piel con él mientras estuvo en la UCI? ¿cuánto tiempo estuvo ingresado?
Mi bebé nació con problemas de maduración pulmonar hizo membrana hialina por eso debió estar conectado a ventilador mecánico por 1 semanas en esa semana no pude nada más que mirarlo porque estaba lleno de tubos luego le pusieron un ventilador menos invasivo y sondas por donde comía. A los 10 días aproximadamente de vida recién pude cargarlo. Estuvo más o menos 1 mes y unos días ingresado
Cuándo pudieron llevarle a casa, ¿seguía conectado a alguna máquina?
Cuando lo llevamos a casa se fue sin ninguna máquina pero por su prematurez hizo apnea que es cuando el bebé deja de respirar fue terrible en su primera crisis gracias a Dios nos pilló despiertos luego de esta lo volvieron a internar por un mes más y cuando volvió a casa debió ir conectado a un ventilador cardiorrespiratorio por 2 meses. Hoy tiene revisiones especiales con su pediatra que es especialista en prematuros debe ver a la oftalmología al neurólogo cardiólogo y varios especialistas cada mes
Muchas gracias Tamara por compartir tu historia, y felicidades por ese tremendo luchador que es Simón. Espero que estés disfrutando mucho del camino de la maternidad junto a tu pequeño. Felicidades familia por superar los inconvenientes y salir adelante.
Quiero cerrar esta historia con una foto que me envía Tamara, del pequeño Simón con 7 meses:
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