De acuerdo a la entrevista que le hizo el periódico El Tiempo a la experta portuguesa en literatura infantil Adélia Carvalho, ella comenta la razón de por qué hay que leer con los niños desde muy pequeños:
“Leer desde los primeros años definirá si un niño tendrá o no hábitos de lectura. Y estos hábitos son importantísimos, pues ya existen estudios que confirman que la lectura es el mejor estimulante cerebral que tenemos, y lo más accesible. En cualquier momento podremos tener un libro con nosotros, llevarlo a cualquier lado y sin ningún esfuerzo. Leer ayuda a desarrollar la inteligencia emocional, tan esencial para el crecimiento del niño, para una mejor comprensión del mundo.”
(Tomado el 23 de abril de 2013 de: http://www.eltiempo.com/entretenimiento/libros/ARTICULO-WEB-NEW_NOTA_INTERIOR-12745122.html)
¿Cómo lo hacemos?
Se deben crear espacios de encuentro con las familias para mostrarles que es posible leer y lo fácil que puede serlo, y sobre todo acercar a los adultos a que tengan un reencuentro con su infancia a través de los libros para niños.
Teniendo en cuenta lo anterior, desarrollamos una iniciativa en la que pensamos primero en un lugar no convencional, que sea divertido y al que vayan familias de carne y hueso. Queremos aterrizar el concepto de familia, a un papá, una mamá y unos niños.
Pensamos en poner al alcance de los niños una colección de libros infantiles, que previamente hemos escogido bajo el criterio de selección de que son libros que después de leerlos, nos han revelado algo sobre nosotros mismos, nos han hecho cuestionarnos, nos sorprenden, nos hacen reír, pero sobre todo que han logrado transformarnos.
Encontramos que el lugar ideal es un parque, porque ahí tenemos la población que queremos impactar a través de la experiencia de lectura en familia. La propuesta ha sido llevar un mantel de picnic, cobijas para sentarse, y una colección de libros. Después de organizar todo, invitamos a las familias a que se acerquen y lean. Hemos observado que mientras los adultos lo piensan dos veces, cuando hablamos directamente con los niños, ellos son los primeros en decir que sí y salen corriendo sin pensarlo. De esta manera, y desde la experiencia, les probamos a las familias y reafirmamos que los niños efectivamente tienen toda la disposición para la lectura, les gusta que les lean y entre más les leen más libros piden . De la misma forma, somos los adultos quienes lo pensamos dos veces y en la vida cotidiana los grandes son los que tienen la última palabra.
Para tener niños lectores es necesario dar ejemplo. La iniciativa busca reconectar a los adultos con lo divertido que resulta leer y sobre todo con lo maravilloso que es leer en familia.
Al respecto Adélia Carvalho comenta:
“Primero, es importante que los niños vean a sus padres leer, para que así sientan que un libro es un objeto importante para los padres; si es importante para los papás, también lo será para ellos. Después, crear hábitos de frecuentar librerías, ferias de libros y construir poco a poco una pequeña biblioteca.
Así los niños van a percibir que los libros son tan necesarios como los juegos y que tienen su lugar en casa.”
(Tomado el 23 de abril de 2013 de: http://www.eltiempo.com/entretenimiento/libros/ARTICULO-WEB-NEW_NOTA_INTERIOR-12745122.html)
Y lo más importante, entre mayor sea la variedad de libros a los que los niños puedan acceder mayor serán sus ganas de seguir leyendo, porque esto potencializa la curiosidad frente a la gran variedad de libros que los están esperando.
La entrevista a la escritora portuguesa finaliza con la siguiente pregunta y respuesta:
¿Qué hace que un niño sea un buen lector?
Tener acceso a muchos libros, de variados temas y escritores; cuanto más leemos, mejores lectores nos volveremos.
(Tomado el 23 de abril de 2013 de: http://www.eltiempo.com/entretenimiento/libros/ARTICULO-WEB-NEW_NOTA_INTERIOR-12745122.html)
Teniendo en cuenta todo lo anterior, la iniciativa de Picnic de Palabras resulta una solución al problema de la falta de lectura en Colombia: por lo sencilla, novedosa y fácil de replicar. Es una alternativa para potencializar la lectura en familia, mientras se sensibiliza a los adultos acerca de la importancia y beneficios de dicha práctica tanto en sus vidas como en las vidas de sus hijos.
Paula Freire destaca el valor del acto de lectura como un momento que resulta revelador para cada lector.
El auténtico acto de leer es un proceso dialéctico que sintetiza la relación existente entre conocimiento-transformación del mundo y conocimiento-transformación de nosotros mismos.
Leer es pronunciar el mundo, es el acto que permite al hombre y a la mujer tomar distancia de su práctica (codificarla) para conocerla críticamente, volviendo a ella para transformarla y transformarse a sí mismos. (La importancia de leer y el proceso de liberación, pg. 17)
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