By Ana
Ainsss…Y es que de nuevo he vuelto a encontrar en su blog, un artículo donde no se si cabrearme o comérmela a besos. Es que es taaan mona, tan cuuuqui, taaan estupenda, que de verdad, cuando se pone a hablar de cosas taaan trascendentales, me pasa lo dicho: Que no sé si darle un repasito o ponerle un altar!!!. Es evidente, que todo lo que hable de ahora en adelante, lo haré “reconcomida” (o, como diría mi abuela…”reconcomiíta”) de envidia de la mala, pero bueno, el que avisa no es traidor.
Resulta que en su último post, Sara nos comenta que últimamente no le da tiempo a nada, que está liada con un “superproyecto” precioso, y que no le da la vida con tantas cosas en la cabeza (¿Qué no le da la vida?.....¿Que no le da la vida??. Por favor…leed esto si queréis saber qué es, que la vida no te dé!!!, jajajaja).
En fin, que tan “achuchá” va la Carbonero, que nota que le falta la memoria y todo (Y no me extraña, si recordamos la de cosas que hacía durante tooodo un día entero, como podías ver aquí), y nos da la explicación científica: “Al convertirnos en madre, el cerebro se transforma y se centra en aspectos más plásticos e importantes, especialmente centrado en todo lo que gira en torno al bebé”….. Vamos, lo que tú y yo veníamos diciendo desde que parimos: “No llevo estos pelos porque esté tonta perdía, es que después de preparar el macuto de las niñas, pañales, comidas de ambas, muda de emergencia, aguas, pañuelitos, abrigos y camiseta de manga corta de respuesto (que para eso estamos en primavera) y todo esto para salir a dos calles más abajo, de lo que me he olvidado es de PEINARME!!!”
Después nos dice, que le estaba contando todo esto a una amiga, que se mosqueó porque no la escuchaba, y que empezó a darse cuenta de la cantidad de cosas por las que nos quejábamos, a lo que afirma: La sociedad no para de quejarse. Nos recomienda algunas cositas que leer y escuchar…y total, todo este rollo para decirnos que se ha unido a la iniciativa de NO QUEJARSE DURANTE 21 DÍAS. (Consiste en evitar quejarse durante 21 días, utilizando una pulserita como recordatorio, y si no lo consigues, volver a empezar desde el día 0). Seguro que conocéis la iniciativa, porque la siguen muchas de nuestras blogueras cercanas.
Y aquí es cuando me cabreo yo misma conmigo misma:
1.- Ains, chica, si no es obligatorio comprarse la pulserita chachi del pastor chachi, tal como nos dices (que seguramente costará un huevito chachi), no te la coloques tú, mujer......no hace falta que lo veamos…
2.- A ver, soy consciente de que la iniciativa es fantástica, y muy loable, pero me pilla en un momento tan poco zen que tengo que decirlo: QUEJARSE ES UNA FORMA DE REIVINDICAR, como contábamos durante el día de la Mujer (aquí). Quejarse es sano, libera energía, te quedas a gusto……..eso sí, SIEMPRE QUE TRAS LA QUEJA VENGA EL PROPÓSITO DE CAMBIO, ya sabes: SI NO TE GUSTA, DILO, PERO CÚRRATELO PARA QUE CAMBIE LA COSA!!.
Es que me irrita un pelín eso de que encima de que te cruces con cosas que no te gustan, además tengamos que sentirnos culpables por protestar y quejarnos. NO ME UNO, ea….ea y ea, jajajaja…
3.- No te justifiques, Sara, por fa…Si ya eres envidiable así como eres, no necesitamos saber que lo estás intentando, y que metes la pata, y menos con relatos tipo: “Llevo el día fatal….y además, le había dicho a una amiga que viniera a casa esta tarde a preparar un regalo para otra amiga, pero la primera es un poco vaga, le va a dar pereza y seguro que no viene, así que me tocará prepararlo sola…”.
Joo, chica........imagínate, si además, después de venir del curro, tuvieras que hacerle tú la cena al niño, poner las lavadoras, limpiar lo que te dejaste pendiente y hacer la comida para el día siguiente…igual te sentaba de lujo, “protestar” un poquito!!! jajajaja…
4.- Y sí, podéis decirlo........Mi envidia se huele a leguas…jajajaja….Si es que después de todo, no me cae ni mal, jajajajaja….