Matronatación ¡Prúebala!
Desde los 4 meses de edad puedes practicar matronatación con tu bebé, esta actividad tan saludable y completa busca ante todo que el bebé se familiarice con el agua lo más temprano posible. Siembra la autoconfianza de tu bebé y estimula todas sus habilidades psicomotoras.
Una gran ventaja, el contacto piel con piel
Uno de los grandes beneficios que provoca el nadar con tu bebé, es, sin duda, el increíble vínculo que se refuerza aún más con tu pequeño. Seguro que has oído hablar del contacto piel con piel cuando el bebé es un recién nacido, y todos los beneficios que aporta a mamá/papá y bebé. Bien, pues esta práctica no tienes por qué abandonarla según tu hijo cumpla días o semanas, al revés.
¿Cómo se pone en práctica?
Dentro de la piscina, puedes poner en práctica diferentes formas de natación respetuosa, que viene a ser ése tipo de natación en el que el amor, el silencio, el calor y el contacto madre e hijo es lo único que necesitaréis.
Porta a tu bebé en brazos y acercártelo al pecho. En la mayor parte de las ocasiones, este gesto saldrá espontáneo, ya que tu bebé se sentirá tremendamente protegido en tu regazo y no querrá despegarse de ti. Sin embargo, poco a poco, puedes empezar a jugar con él, a dar pequeños saltos y a seguir las instrucciones que te den los orientadores de la piscina donde estés realizando la matronatación.
Después de bañaros juntos podéis dedicaros a lo que se llama establecer un diálogo piel con piel o respetuoso en el que, en un espacio confortable, te dedicarás a llenar de mimos y caricias a tu hijo creando un ambiente espectacular y único.
Los beneficios del contacto piel con piel después o antes del baño son múltiples. Está demostrado que el agua y el bebé son un tándem de lo más positivo: desde que el bebé está en el vientre materno, pasando por el parto natural en el agua hasta la matronatación.
Hacen que el bebé esté feliz y relajado, la situación de confort es casi inigualable a otras sensaciones, por el poder relajante del agua, junto a la sensación de protección de estar pegado al cuerpo materno. Además, la psicomotricidad del niño y su propia vida emocional se ven altamente estimuladas gracias al contacto piel con piel.
Para lograr una mayor comodidad de tu hijo y mejorar la experiencia, queremos recomendarte algo que puede ser de gran ayuda a la hora de las clases de natación en el agua con tu bebé. Se trata de unos bañadores desechables que protegen como un pañal, pero sin hincharse dentro del agua. ¿Conoces ya Huggies® Little Swimmers®?
Estos bañadores dedicados a los pequeños de la casa cuentan con una abertura lateral que hace muy sencillo su uso, además de una cintura elástica ajustable y barreras laterales anti escapes. ¿No es genial? Además, Huggies® Little Swimmers® cuenta con diseños muy divertidos de la película 'Buscando a Dory' que le encantarán.